La gran pregunta que muchas mujeres se realizan unas cuántas veces a lo largo de su vida, tanto de muy jovencitas si han tenido una noche «loca» como si ya están buscando el tener un bebé.
En algún momento de tu vida seguro que te has hecho la pregunta de si estás embarazada.
Y la respuesta es fácil. La sabes porque lo has oído y leído en multitud de lugares, pero cuándo te asalta la duda nunca estás segura y quieres saberlo seguro.
La confirmación más segura es la confirmación por ecografía realizada por un médico, aunque hasta las 12 semanas del embarazo no suele ser posible confirmarlo. Tras ésta prueba, a nivel de fiabilidad, se encuentra el test sanguíneo. Por orden de fiabilidad seguiremos con los test de orina clínicos y después los test de orina caseros. Por último las pruebas menos fiables son los síntomas del embarazo, aunque bien es cierto que cuándo tenemos uno o más síntomas claros de embarazo empezamos a hacernos el resto de pruebas.
Primeros síntomas de embarazo
Lo primero que buscamos es el conocer todos los síntomas del embarazo. Aunque estés embarazada es posible que sólo experimentes alguno, todos o bien ninguno. Los síntomas típicos que asociamos al embarazo son síntomas que frecuentemente se dan en el embarazo, pero cada uno de ellos puede ser síntoma de otra cosa y no de un embarazo (ej. el cansancio puede ser un síntoma de una anemia y no de un embarazo).
Los síntomas del embarazo más frecuentes son los siguientes:
– No ovular o perder el periodo: éste es el síntoma más importante y frecuentemente es el que nos da «la voz de alarma».
– Aumento de tamaño de los senos.
– Cansancio y sueño, generalmente a partir de la segunda o tercera semana de embarazo.
– Náuseas y vómitos, aunque no tan frecuentes ni espectaculares como se ven en las películas de ficción.
– Pequeños sangrados vaginales, que se pueden confundir fácilmente con venidas del periodo.
– Mayor percepción de intensidad de los olores, cambiando incluso el gusto por determinados olores.
– Apetencia o repulsión alimenticia, muy relacionada con el cambio de percepción de olores y gusto.
– Tensión arterial disminuida, lo que origina a veces pequeños mareos o desmayos.
– Frecuencia de micción aumentada (orinas más veces).
– Aumento de temperatura corporal.
– Aumento del tamaño y volumen del abdomen debido a la retención de gases.
– Dolores pelvianos.
– Constipación y flatulencia.
El test de embarazo de orina casero
Sin duda el test con una fiabilidad muy alta y que fácilmente podemos adquirir es el test de orina casero. Este test lo compone un reactivo a la hormona hCG (Gonadotrofina Coriónica Humana). Ésta es la hormona responsable de que las defensas inmunes de la madre no ataquen al óvulo fecundado, ya que de otro modo el sistema inmune de la madre no reconocería al óvulo como propio (recordemos que tiene distinto ADN) y lo atacarían.
Gracias al aumento de la hCG el embarazo puede llegar a buen puerto y lo que hace el test de orina es simplemente reaccionar con la presencia de esta hormona.
Los test de orina caseros son muy fiables y muy raramente puede dar un falso positivo. ¿Qué significa ésto? Muy sencillo: si te sale positivo puedes estar muy segura de que estás embarazada.
¿Y si sale negativo? Aquí la fiabilidad es algo menor pero sigue siendo muy alta. Si sale negativo quiere decir que normalmente no estarás embarazada pero si quieres una mayor fiabilidad deberás realizarte algún test más sensible, ya que es posible aunque extraño que estés embarazada y tus niveles de hormonas hCG estén bajas.
El test de embarazo de orina clínico
Es muy similar al casero pero en lugar de usar un simple reactivo para medir la hCG se realizan análisis en laboratorio. Sólo suelen ser ordenados a veces por los médicos y su fiabilidad es muy alta.
El test de embarazo sanguíneo
Se trata de un test muy sensible que es capaz de reconocer embarazos con bajos niveles de hCG en el cuerpo de la madre. Usualmente sólo se reserva a mujeres con muchas dificultades para quedarse embarazadas y de las que el médico sospecha que puede haber algún problema hormonal.
Entonces, cómo saber si estoy embarazada
La respuesta más rápida, sencilla y que sirve para la inmensa mayoría de mujeres de este planeta es la siguiente: cómprate un test de embarazo casero. Son muy fiables. Y si salen dos líneas, aunque la segunda sea un poco flojita, ¡enhorabuena!