Hablo con un Empresario. Me dice “tengo dinero. Tengo amigos y conocidos en el sector, con dinero. Sigue habiendo mucho dinero. Pero no es sólo que hay que esperar a ver qué pasa. Es que me han quitado las ganas de hacer nada”.
Y ese nada tiene un complemento que no menciona: “nada, aquí”.
Es un hombre que se ha movido mucho. Demasiadas horas durmiendo en hoteles, comiendo con clientes. Que NO ha visto crecer a sus hijos. Quien no lo entiende piensa “trabaja por pura avaricia” “el rico nunca está satisfecho” “si yo tuviera lo que él, estaría en el Caribe todos los días” “¿para qué quieres ser el más rico del cementerio?”
No entienden nada.
Conozco personas con mucho dinero que atesoran por avaricia. Pero son una fracción minúscula. Otros buscan el pelotazo, pero son especuladores, no Empresarios. Conozco a otros que disfrutan de sus rentas como parásitos. Pero curiosamente, las han recibido como herencia. No aportan más que el consumo que realizan.
Los que de verdad crean riqueza, esos que hoy están aquí, mañana en México y pasado en China, esos entienden que el dinero es siempre un medio y una consecuencia. Nunca un fin en sí mismo. Es la manifestación del trabajo bien hecho y la potencia para emprender nuevos proyectos.
Viven bien, es cierto, tontos no son. Pero suelen tener un vicio: han hecho de su trabajo un proyecto de vida. Y bien caro que pagan por ese vicio. No son los empresarios que trabajan para el Gobierno, arañando el Boletín del Estado. Trabajan para el Mercado. Y(no creo ser un ingenuo) cada Euro que tienen, lo han sudado.
A los Empresarios, que no “Emprendedores” los están quemando.
No les duele pagar por patrimonio. Les duele la injusticia que significa ser penalizados por ahorrar e intentar asegurar su futuro. Les duele el insulto que significa la expresión “que paguen los ricos” implicando que toda riqueza es moralmente delictiva. Les duele que Hacienda confisque el 60% de sus ingresos (llamándoles además defraudadores) bajo la excusa de que “así tendremos más maestros”, cuando luego lo que tenemos son más coches oficiales y despilfarros autonómicos.
Pero ¡cuidado!…Saben que tiene la sartén por el mango.
Porque si en algún momento un Gobierno quiere sacar esto adelante, no lo va a lograr con falsas medidas macroeconómicas.
La crisis, a muchos de ellos, les está viniendo muy bien. Porque les hace salir fuera, la gran asignatura pendiente. Lo que no mueven aquí, lo hace allí. Y eso les permite volverse exigentes. Quien se expande por Brasil, sonríe cuando le hablas de Andalucía.
Es nuestra nueva emigración. Profesionales y Empresarios/as con capacidad para mover una sociedad. Sus iguales ya se fueron al finalizar la Guerra Civil, y eso ayudó mucho a mantener los cuarenta años de mediocridad Franquista.
¿Podemos volver a perderlos ahora?