Cómo ser mejor persona en tu pareja y la relación
Una vez que las personas encuentran y comienzan a construir una relación de pareja que quieren mantener, al menos en principio, el resto de su vida; algo nuevo nace en el interior de cada una de las partes. Previamente, sólo se pensaba en sí mismo, siempre hablando en primera persona o de la familia nuclear. Luego de encontrar a esta persona tan especial para compartir en pareja la vida, comienza a dibujarse un 'somos dos', haciendo referencia a ´la pareja y mi propia persona´.
En ese momento crucial del ciclo vital en el que se vive ese 'somos dos' sin anulación ni eclipse de ninguna de las dos personas que se unen para fortalecer el vínculo afectivo, sino que ambos 'yoes' crecen y maduran en forma conjunta respetando y reconociendo las diferencias individuales, es cuando se puede afirmar que el ser pareja funciona de manera óptima. Y continuará así si ambos dedican tiempo al mantenimiento diario de la pareja y superen juntos las diversas situaciones vitales los vayan 'poniendo a prueba'.
Cómo ser mejor persona en tu pareja: individualmente cada uno encuentra su camino junto a su pareja, un camino que se renueva todos los días!
¿Puedes ser mejor persona en tu pareja?
El planteo de ser mejor persona con tu pareja surge de pensar que compartir una vida con otra persona es un hecho que complejiza nuestra propia existencia y nos lleva a transcender lo que somos en forma individual para ir en busca del amor de pareja, para poder compartir nuestra intimidad con esa persona tan especial. Y si la propuesta es conjunta, en el camino, se va mejorando de a dos, a medida que se van dando situaciones difíciles se va aprendiendo a manejarlas también juntos como pareja.
No creas que las personas que forman una relación de pareja sana están fusionadas, piensan como uno y pierden su individualidad, sino que, individualmente cada uno encuentra su camino junto a su pareja, un camino que se renueva todos los días; con la necesaria intimidad, confianza, comprensión y paciencia mutua que les permite gozar de una sana libertad que va retroalimentándose porque está basada en una relación firme y coherente. Si logras pensar y obrar de una manera muy similar, de a dos, como si estuvieras resonando en una misma nota en forma asertiva y empática te darás cuenta que la vida se puede vivir de una manera mucho más positiva.
Es así como sentir que pertenecemos a una relación de pareja, y a su vez, sentirnos individuos autónomos, nos lleva a construir un vínculo afectivo mutuo que perdura y se fortalece con el tiempo. Además, la consecuencia natural de vivir de esta forma es sentirse mejores personas de lo que se era antes de generar dicho vínculo. Como consecuencia cada uno podrá expandir los horizontes, alcanzar la autorealización individual y la prosperidad económica dentro del proyecto en pareja.
Imagen por cortesía de Vichaya Kiatying-Angsulee / freedigitalphotos.net