Obtener un producto de calidad debe ser nuestra meta como escritores. La corrección y la edición no son el final, son solo un escalón en esta travesía hacia la tan anhelada perfección.
Seamos honestos, por más que lloremos de humildad, siempre queremos más y más. Podemos pasar horas enteras revisando un mismo párrafo y no quedar satisfechos, o reubicar una y otra vez un capítulo porque sentimos que no cuadra en la historia. Es un proceso de nunca acabar.
Sin embargo, cuando hablamos de personajes muchas veces nos enfocamos solo en lo que nos han enseñado: que sean redondos, que posean una ficha interminable y un trasfondo creíble, abandonando un aspecto que puede marcar la diferencia hacia nuestros lectores: su representación. ¿Pero qué es la representación?
Te lo explicaré de una forma sencilla. Supongamos que te encuentras en un proceso judicial o jurídico y no puedes asistir a una reunión en especial. Envías a tu abogado para que hable por ti y exprese tu punto de vista. ¿Qué sucedería si tu abogado decide salirse del papel y tomar la vocería a cuenta propia? El juez, los demás abogados y el jurado creerán lo que él dice y asumirán que es verdad toda aquella falacia.
¿Quieres otro ejemplo? ¿Recuerdas la película ? La cinta despertó uno de nuestros más terribles temores y muchos aún vemos el horizonte cuando estamos en la playa, buscando a esa horrible y grisácea aleta.
¿Qué representación dio Spielberg de esos "inofensivos pececitos"? Que atacan por placer, que acechan a los nadadores y que matan a diestro y siniestro.
¿Crees que el director lo planeó todo? ¿Quiso fomentar la caza indiscriminada de tiburones? No lo creo, el solo dirigió una película sobre un pez. Nosotros fuimos quienes nos idealizamos y creímos la idea de que todos los tiburones son malvados.
Lo mismo sucede con los escritores, los cantantes, los actores y los juegos de vídeo. Con el tiempo, nos han vendido una imagen errónea de las minorías. Nos dicen que la mujer es inferior al hombre, que los negros son criminales, los gais son enfermos y las personas con discapacidad son dependientes (no quiero mencionar a quienes clasificamos como terroristas pero ya te imaginarás).
Estas y otras ideas han prevalecido con el tiempo y nos hemos encargado de enseñarlas a nuestros hijos como algo sagrado. Si vas por la acera y viene un negro, cuida tu bolso , " No te juntes con un homosexual o te volverás homosexual " , " los hombres no deben llorar y las mujeres en la casa " .
Desgraciadamente, está tan arraigado este problema en nuestras entrañas que se convirtió en parte de la idiosincrasia del ciudadano, por lo que es normal que se nos "cuelen" al momento de escribir y crear a los personajes.
¿Estoy mintiendo? No lo creo, aunque debo admitir que hay avances y muchos han vaciado sus discos duros de tanta basura. Por lo menos ya no le temen tanto a los tiburones.
¿Por qué es importante la lucha por la representación positiva y cómo te hace mejor escritor?
Aunque ya lo he comentado en otras entradas, la forma como nuestros medios representan a las mujeres, negros, LGTB y personajes con discapacidad , entre otros, envía un mensaje equívoco a la sociedad, especialmente a los niños y a los adolescentes, que ven como su género, raza, situación o creencia es menospreciada e infravalorada, por lo que se generan sentimientos de inseguridad y dificultad de aceptación. Situación muy diferente ocurre en el grupo catalogado como mayoritario (hombre blanco heterosexual), que se ve representado como superior en muchos aspectos.
Las niñas quisieran ser niños y los negros darían la vida por ser blancos. ¿No me crees? En 1947, Kenneth y Mamie Clark realizaron un estudio en el que a los niños se les mostraron dos muñecos, uno blanco y uno negro. Luego se les pidió que, según el color, decidieran cuál era bueno y cuál malo. Sobra decir cuál fue el muñeco bueno para la mayoría.
Quizás dices: vamos, Piper, es 1947. Son otras épocas.
Tienes razón, evasivo joven, pero si hicieras esa misma prueba en tu ciudad esta noche, ¿qué resultado esperas obtener?
Nos esforzamos por hacer que nuestros niños lean y deseamos que disfruten de su viaje al mar, pero lo que leen o ven en los medios es diferente a la realidad. Los chicos blancos se ven a ellos mismos como superiores y todos, si, todos, tememos ser devorados por un tiburón.
Queremos cambiar la representación de las minorías, pero primero debemos tenerlas en cuenta al escribir. ¿Sabes cuántas historias de personajes blancos heterosexuales han sido escritas? Millares. Incluye personajes negros en tus historias , no tengas miedo. Sé un mejor escritor. Sé un escritor incluyente.
Pero no se trata de incluirlas por cumplir, o estarías convirtiendo a esos personajes en de igualdad. Es acerca de analizarnos a nosotros mismos y aceptar que nos falta mucho por aprender. Somos machistas inconscientes, incluimos frases racistas sin darnos cuenta, queremos que los delfines asesinen tiburones y subestimamos a las personas con discapacidad. Todo sin darnos cuenta.
Por esta razón la semana pasada incursioné en el tema de los test para evaluar personajes . Lo hice porque creo que los escritores y los lectores necesitamos una herramienta que nos ayude a detectar en qué estamos fallando y tomar las medidas a tiempo. Al fin y al cabo, estamos hablando sobre perfeccionarnos como escritores, y deshacernos de los prejuicios al escribir es parte importante del proceso.
Por lo tanto, buscando aquí y allá di con una herramienta que consolida todos estos test y que, por medio de un resultado medible, ayuda al escritor o al lector a hacerse una idea de qué tan representada está una minoría en un libro.
El test de representación. Todo en uno
La herramienta principal fue creada en PDF por therepresentationproject.org con el objetivo de mejorar el test de bechdel, pues todos sabemos que cualquier película o libro puede superarla con facilidad o fracasar a pesar de contar con mujeres fuertes. Lastimosamente, este documento fue creado solo para el cine.
Con el fin de maximizar su utilidad transferí las preguntas a un documento en Excel, que de forma automática, y a medida que vamos respondiéndolas, nos genera un valor. El resultado nos permite analizar qué tanta representación poseen las minorías en el libro evaluado pero no debe ser usado para catalogar a un libro o a un escritor como machista, racista o feminista.
¿Qué tiene de nuevo o diferente esta herramienta?
Además de evaluar el test de bechdel, los test étnicos, los test LGTB y los test de personajes con discapacidad, también aborda varios aspectos:
A raíz de la evidente diferencia entre los géneros, nacen proyectos como 1. Evalúa al autor del libro, lo cual es bueno, ya que si lo piensas bien, ¿qué porcentaje de los libros que has leído fue escrito por hombres blancos heterosexuales? ¿Por qué crees que pasa esto? ¿Las mujeres escriben menos? ¿Y los escritores negros, asiáticos? ¿Será que no escriben bien o tienen menos probabilidad de ser publicados y leídos? La Nave invisible y sus movimientos:
#LeoAutoras, que promueve la lectura de escritoras.
#LCNaveladrona, como homenaje a las escritoras afrodescendientes.
#Adoptaunaautora , para dar a conocer la vida y obra de autoras.
Creo que incluir esta categoría aumenta la representación del libro y me gusta mucho.
2. Evalúa la representación de las mujeres en el libro, no solo su representación física, sino también su edad y origen étnico. Muy buen aporte. ¿Has pensado alguna vez en que tu protagonista sea un adulto mayor? Esta entrada de Lecturonauta nos habla del tema y he incluido este listado de 5 libros protagonizados por adultos mayores.
3. Evalúa la participación masculina ¡Sí! Muchas de sus preguntas apuntan al género masculino. Pero no como tú crees, ya que evaluar la presencia de hombres en un libro es redundancia. Indaga si se resalta, glorifica o celebra la violencia.
Aclaro, no se juzga la presencia de violencia en un libro (si así fuera la mayoría se rajaría), analiza si resalta las acciones violentas como algo positivo. Al responder debes tener cuidado de no equivocarte en el concepto.
El test también pregunta si el libro perpetúa el ideal de un cuerpo insalubre y extremo en los hombres. ¿A qué se refiere?
A que los hombres, al igual que las mujeres, podemos estar expuestos a los ideales extremos de perfección corporal, y estos ideales afectan la manera como nos vemos y aceptamos a nosotros mismos.
Algunos estudios confirman que los varones también crecen con la percepción de que un cuerpo no perfecto es negativo.
4. El único aspecto que no abarca el documento es cómo tratar el miedo a los tiburones, pero creo que a estas alturas ya deberías comprender que mucho de ese temor radica en lo que has visto, leído y oído de fuentes no confiables como películas y series de televisión.
¿En dónde puedes conseguir esta herramienta?
¡Aquí! ¡Es totalmente gratis! Si quieres hacerte con él solo tienes que hacer clic . Descárgalo.
También puedes observar el siguiente vídeo, en el que lo uso por primera vez con el libro Los juegos del hambre, medimos su representación y aprendemos a usarlo. Acompáñame y échale un vistazo.
¿Qué te ha parecido? Quisiera que le echaras un vistazo y me ayudes a mejorarlo. Si crees que le hace falta o le sobra algo no dudes en decírmelo.
También me gustaría que si lo vas a usar con tus lecturas me hicieras llegar los resultados, para que en conjunto alimentemos el documento y obtengamos resultados estadísticos más confiables y reales.
Para terminar (vaya que resultó larga la entrada), recordarte que ser un buen escritor no significa conocerte todas las normas ortográficas y gramaticales que existen. Ser un buen escritor es no valerte de prejuicios y estereotipos al escribir. Ser un buen escritor es pensar en tus lectores al hacerlo. Ser un buen escritor es ser un buen ser humano.
Quisiera conocer tu opinión, no dudes en escribirme.