Ser paquete en la moto y en la vida es algo que hay que tomarse muy en serio; de ello depende la seguridad de ambos. Es necesario apretujarse, al ir muy juntos el conjunto es mucho más estable. Pero cuidado, porque pegar el cuerpo no significa darle un cabezazo cada vez que haya un parón. Hay que saber mantener la distancia.
El acompañante, no debe agarrar al piloto por los hombros u otras partes del cuerpo que intervengan en la conducción. La cintura es un buen lugar para agarrarse al piloto, pero es importante intentar mantener la posición hacia delante. Hacia delante no significa encima del conductor estorbándole
Si vamos de paquete, significa que nosotros no conducimos y por tanto debemos dejar que lo haga el piloto. Es importante no pensar que "nosotros PODEMOS hacerlo mejor" y dejar que sea el piloto quien lleve los movimientos. Es mejor estarse quietecito y no molestar, que intentar acompañar los movimientos, pasarnos de entusiasmo y acabar los dos por el suelo.
Tampoco hay que "dormirse" ensimismados en pensamientos utópicos, cansinos y repetitivos. Hay que estar atentos a la conducción para prepararnos ante acelerones, frenazos, curvas, semáforos… y evitar así que el piloto se sienta como si tuviera una masa insulsa en su espalda.
Los asideros para el pasajero en la parte trasera, son el lugar ideal para que el paquete se ancle a la moto y se deje llevar por los movimientos de la persona que pilota.
La comunicación entre piloto y pasajero sólo es buena si se dispone de intercomunicadores en los cascos. Con el casco puesto no se oye absolutamente nada.
Si no queréis acabar los dos en el suelo, moto incluida, esperad a que os den permiso para subir a la moto. Si lo hacéis sin avisar y pilláis desprevenido al conductor, os espera el suelo.
Y para finalizar, lo mas importe: No es recomendable montarse de paquete en la moto de alguien que no conoces. Primero conócelo y asegúrate de que es alguien en quien puedes confiar.
(*) Comentaros que “piloto” y “paquete” que ilustran este post no son un buen ejemplo. No llevan casco, ni la ropa adecuada, ni tienen cara de ser buenos amigos.