Los últimos años han puesto de manifiesto la creciente necesidad de diversificar las operaciones de la cadena de suministro como base para seguir garantizándolo y mantener la producción. Muchas empresas han tomado medidas con el objetivo de simplificar sus cadenas de suministro, pero lograr una verdadera diversificación puede resultar más difícil. En especial si se tiene en cuenta una serie de factores como el conflicto armado entre Rusia y Ucrania y su impacto directo los costes de la energía. Pero ¿Cómo pueden las compañías mantener a flote su negocio y cadena de suministro para seguir operando?
Por ello, Expense Reduction Analysts (ERA), consultora especializada en la optimización de costes y la gestión de proveedores, detalla 3 claves que deben tener en cuenta las compañías para optimizar sus procesos pese al contexto actual:
Diversificar la cadena de suministro: la creación de una red de proveedores alternativos en lugar de depender de uno solo es la forma más eficaz de garantizar que su empresa pueda seguir funcionando a lo largo de cualquier cambio en el mercado local, nacional o internacional.
El mayor beneficio de la diversificación de la cadena de suministro es una mejor gestión del riesgo. Si uno de sus proveedores no puede mantener los niveles esperados debido a los cambios del mercado, otro proveedor puede cubrir el hueco y mantener su negocio en funcionamiento de forma eficiente.
Controlar los gastos energéticos para seguir operando: los proveedores de energía son muy conscientes del impacto potencial del aumento de los precios de la energía en las empresas. Si se realiza un planteamiento razonable, es posible que se puedan acordar planes de pago a largo plazo que ayuden a ambas partes en este difícil período y negociar un mejor acuerdo. Además, en la medida de lo posible, las empresas deben asegurarse de que se les factura por el uso correcto de la energía realizando lecturas periódicas del contador.
Otro punto clave puede ser explorar oportunidades de energía sostenible. Las empresas deberían dedicar tiempo a investigar cualquier posible subvención o plan relacionado con la sostenibilidad y la eficiencia energética, ya que podrían reducir aún más las facturas de energía a medio y largo plazo. También, la inversión en elementos como el aislamiento, la iluminación ecológica y las buenas prácticas generales de sostenibilidad ayudarán a reducir el aumento de la factura energética.
Buscar socios estratégicos para optimizar procesos: el contexto actual demanda acciones vitales para poder adaptarse al cambio y tener una hoja de ruta ya definida. Por ejemplo, dentro de la cadena de suministro, hay costes fuera de los inmediatos de materiales que dan mucho ahorro potencial y una mejora en los procesos, como los de, logística, gestión del inventario, compras, etc.
Incluso en estos tiempos en los que la inflación marca récords históricos y los ingresos sean menores, buscar aliados para compensarla debe ser prioritario para que las compañías mantengan su negocio en el dinamismo del contexto actual. En este sentido, ERA ayuda a sus clientes a optimizar costes, gestionar proveedores y buscar alternativas ante las problemáticas de abastecimiento de la cadena de suministro, ahorro y controlar los gastos energéticos.
“Repensar los modelos actuales de logística y energía será fundamental para garantizar la recuperación de las compañías y que estén preparadas para lo que viene. Por ello, la búsqueda de alternativas frente al desabastecimiento, ubicación de centros de producción y el impacto del transporte de materias primas al medioambiente nos permitirá ver de forma integral la problemática y sus soluciones”, destaca Fernando Vázquez, socio consultor y co-area developer de Expense Reduction Analysts. “En ERA contamos con un amplio y experimentado equipo de expertos en diferentes áreas con el objetivo de ayudar a las empresas a reducir los costes, aumentar la liquidez y recuperarse con mayor rapidez”.
Fuente Comunicae