by El Rincón de Ika · Published septiembre 2, 2016 · Updated agosto 25, 2016
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Se acerca el final de verano, la mayor parte ya nos hemos ido y hemos vuelto a la rutina. Sin embargo, en algunas ocasiones la vuelta al trabajo, a los estudios o al día a día en general puede hacerse una cuesta arriba interminable.
Es el momento de recuperar horarios y obligaciones, los días se van acortando y el calor se aleja. ¿Cómo sobrevivir a la cruda realidad? Os traemos algunos trucos para sobrevivir al síndrome postvacacional para empezar tu rutina con energía, vitalidad y, sobretodo, mucha alegría.
Volver unos días antes de empezar la rutina para tener tiempo para organizarte y dejar pasar unos días que te ayuden a asumir la nueva situación es algo que a mí siempre me ha venido muy bien mentalmente hablando y no solo par aponer lavadoras.
Mímate
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Se han acabado las vacaciones, pero no estás en prisión. Haz cosas que te hagan sentir bien como algo de deporte, vencer al cansancio de los primeros días y salir a dar una vuelta, volver a ver a los amigos que también han vuelto de vacaciones y están igual que tú, etc.
Si te gusta cuidarte, mantén una buena hidratación para conseguir que el morenazo que has conseguido perdure en el tiempo. En cuanto a los mimos de la piel, el que más debes cuidar es el de la piel del rostro porque será el que más tarde en recuperarse, una limpieza y un buen tratamiento de exfoliación profesional puede ayudarte mucho a recuperar el aspecto.
Por último, el cuidar el cabello con mascarillas hidratantes te será de utilidad para recuperar el brillo y la fuerza. Probablemente el sol, la sal y el cloro habrán perjudicado mucho a tu cabello, por lo que un corte para sanear las puntas no te va a venir nada mal.
Hábitos saludables
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Como hemos dicho, es importante acompañar la rutina con otras actividades que nos hagan sentir mejor, desde algo de deporte hasta aprovechar los tiempos de descanso para relajar la mente, pero, quizás, algo que nos cuesta más trabajo que dedicarnos un tiempo para mimarnos es recuperar los hábitos saludables después de los excesos del verano.
Sin olvidarte nunca de los 2 litros de agua, mantén una dieta equilibrada que aporte a tu cuerpo lo necesario para tener energía y mantenerlo fuerte. Si has cogido algunos kilos de más este verano, intenta bajarlos antes de que sea tarde, en menos que canta un gallo estamos en navidades y tendrás nuevas excusas para descuidarte, no dejes que las excusas te sirvan para no cuidar tu línea hasta que tengas que volver a entrar en el bikini.
En clave positiva
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El síndrome post-vacacional afecta mucho a nuestro estado de humor. Estamos cansado, tristes, incluso de mal humor, pero no puedes dejar que eso afecte a tu vida diaria y a tu relación con los demás o acabarás teniendo problemas adicionales con los que no contabas y que no buscabas.
Pensarás, ¿y cómo cambio mi estado de humor? Pasa tiempo de ocio con amigos y seres queridos que te hagan disfrutar, si te agobia el tema de las vacaciones puedes optar por anotar todos los puentes, fines de semana y fiestas en el calendario para empezar a hacer planes. Ilusionarte con nuevos viajes y experiencias te motivará para no dejarte caer en la oscuridad, es uno de los consejos de IMEO, el Instituto Médico Europeo de la Obesidad.
De igual modo, recordar los viajes pasados, no solo de este año, sino de tiempo atrás, te ayudará a dibujar una sonrisa en tu cara y te animarán para preparar el siguiente; eso sí, esta opción es no apta para los demasiados nostálgicos.