Las cobayas son mascotas simpáticas, divertidas y sociables. Sin embargo, también son asustadizas por naturaliza porque cuando están en estado salvaje son la presa de muchos depredadores, por lo que su nivel de desconfianza ante lo desconocido es alto. También hay que tener en cuenta que cada animal tiene su propio carácter, por lo que no hay reglas para sociabilizar cobayas que funcionen de forma generalizada. En realidad, sólo hay una fórmula factible, que es tener tiempo y mucha paciencia. Sin embargo, nuestra forma de actuar con este tipo de mascotas también determinará el éxito. Por eso, ahí van unos cuantos consejos para lograr que el animalito nos pierda el miedo y nos coja confianza:
-Debemos pasar tiempo con la cobaya para que nos conozca, para que se dé cuenta de que somos amigos. Deberemos dejar que nos huela y que nos vea.
-Nuestro lenguaje corporal es muy importante. No haremos movimientos bruscos y le hablaremos suave, dulce, sin gritar y a su altura. Es decir, si la jaula está en el suelo, nos tumbaremos para que nos vea bien. Si está sobre una mesa, nos agacharemos o nos sentaremos en una silla. Acabará por reconocer nuestro físico y nuestra voz.
-La sacaremos de la jaula y la pondremos encima de la cama, por ejemplo, con nosotros, para que tenga libertad para inspeccionarnos, olernos…
-La acariciaremos muy suavemente y el máximo tiempo posible, pero de manera progresiva tras la llegada al hogar, no de golpe. Y siempre debéis hacerlo cuando esté tranquila, para que os asocie con una sensación de bienestar.
-Le daremos verduras en mano, las que más le gusten. Tenéis que descubrir qué cosas le gustan para poder hacerlo juntos.
-Podéis tapar parte de la jaula (con una mantita si no es invierno) para que tenga un refugio, para que se sienta segura, sobre todo al principio de la convivencia.
-Pasaremos rato con ella cepillándole el pelo si es algo que le gusta.
-Mejor dos que una sola. Las cobayas son seres gregarios, por lo que viven mejor en compañía. Además, si la cobaya está acompañada por una de su misma especie se sentirá más segura, más apoyada y más tranquila.
Con estos consejos, paciencia y constancia existen muchas posibilidades de que la cobaya os coja confianza. En uno o dos meses ya se pueden apreciar cambios. Sin embargo, como hemos dicho al principio del artículo, cada cobaya tiene su carácter y no hay que desesperarse si no es el animal más cariñoso del mundo. ¡Seguro que tiene otras virtudes!