Antes de ir con lo prometido y contarte cómo superar tus creencias limitantes, por favor permíteme agradecer a Miriam por abrirme la puerta de su casa y presentarnos a través de su proyecto, es un gran honor para mí estar aquí.
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Aunque no es frecuente que seamos conscientes de ello, las creencias limitantes nos mantienen atrapados, condicionan nuestra vida bloqueándonos a la hora de desplegar nuestro natural potencial.
En este artículo encontrarás qué son las creencias limitantes y algunas herramientas y tips para superarlas.
Espero que lo disfrutes y que al final decidas creer, pero en ti.
Vamos a ello.
¡Te espero del otro lado!
¿Qué son las creencias limitantes?
Apuesto a que alguna vez has iniciado una conversación con frases como:
No puedo...
No se me da bien...
No soy tan bueno para...
Yo, por ponerte un ejemplo, iba por la vida diciendo que lo mío eran las letras, hablar, escribir, pero que los números y las finanzas se me daban faltan, total, que no era buena para eso.
¿Cómo crees que llegaba a final de mes? Claro, rasguñando las piedras y el fondo de mi bolsillo.
En general, las creencias son pensamientos que hemos construido en la experiencia, son las bases desde la cuales pensamos y actuamos, las hemos integrado desde el entorno, la cultura o la familia y las consideramos válidas, guiamos y vemos nuestra vida a través de ellas.
De éstas, las creencias limitantes son aquellas que nos atrapan y bloquean, manteniéndonos en una falsa zona de confort que impide que nuestro potencial se desarrolle y despliegue.
¿Cómo superar las creencias limitantes?
Como ya se ha dicho, cualquier cosa que pensemos tiene una importante influencia en la forma cómo nos comportamos o actuamos.
De ahora en adelante ten en cuenta que cualquier acción siempre estará precedida por un pensamiento, y que cada pensamiento se sustenta sobre tus creencias, así que para modificar algunas de tus acciones, y sus resultados, sí o sí deberás revisar antes tus creencias.
Si tomamos decisiones basándonos en falsas creencias, o en creencias que no hemos verificado y que nos están limitando, es probable que los resultados sean de la misma calidad de esas creencias.
Sé que a simple vista no suena sencillo, pero dame la oportunidad de mostrarte algunos trucos que te permitirán identificar tus creencias limitantes y brincar sobre ellas para superarlas.
Recuerda que no podrás modificar aquello que no has atrapado en tu radar de consciencia.
Muchas de las creencias que tenemos las hemos apropiado en la etapa de infancia o aprendizaje, así que te sugiero echar un vistazo a ellas en tanto muchos de los problemas y limitaciones que en la actualidad tenemos nacieron ahí, y hoy los percibimos, en algunos casos, como falta de confianza y/o autoestima.
Algunas de estas creencias adquiridas en esta etapa también pueden estar relacionadas a un miedo, como, por ejemplo:
- Miedo al qué dirán de mí si...
- Miedo a que se rían de mí...
- Miedo a no ser incluido, elegido para...
Más adelante, en la edad adulta, comenzamos a apropiarnos de las creencias del entorno, que nos siguen limitando, algunas de ellas, bastante conocidas, son:
- Hay que estudiar para ser alguien...
- Si me divorcio no podré sostenerme económicamente...
- Cada día es más difícil encontrar trabajo...
- Siempre hubo un pasado mejor...
- El dinero no crece en los árboles...
- Todos los hombres (o mujeres) están cortados con la misma tijera
También podemos apropiar creencias de fuentes de autoridad para nosotros, por ejemplo Google (puede que no sea tu caso, pero hay muchas personas que le creen todo a Google), donde encontramos un artículo que nos dice que sólo tomando 8 vasos de agua al día vamos a recuperar nuestro peso ideal y la elasticidad de la piel.
Otra manera muy eficiente y que te ayudará a identificar tus creencias limitantes es observar cómo te comunicas, expresiones como:
No me va a alcanzar el tiempo para...
No voy a poder...
O las afirmaciones del tipo:
No doy la talla...
Soy una tonta...
Soy incapaz de ser organizado...
Siempre fracaso...
Son muestra de los límites que te estás poniendo.
Hacer consciencia de las creencias y de su origen te ayudará a atraparlas cuando aparezcan, de otra forma continuarás infinitamente en ese temido piloto automático que ha llevado las riendas de tu vida, hasta ahora.
Una de estas creencias era mi favorita, sobre ella construí mi carrera en el sector humanitario en Colombia:
"Ayudar a los demás me hace mejor persona"
A simple vista suena inocente, inspirador, el problema comenzó cuando mi trabajo se hizo más importante que mi bienestar, descuidando mi salud física y emocional; claro, esa creencia venía acompañada por otra:
"Debo responder a las necesidades de la organización"
y así fue como descuidé a mi familia, a mi pareja, trabajando casi 14 horas al día para "cumplir" y, en consecuencia, sentirme merecedora de un salario.
A este punto vale la pena preguntarnos ¿de dónde hemos sacado esas creencias? ¿quién nos dijo que debía ser así?
Tal vez ya nos había pasado antes (experiencia), o ese fue mi caso, me costó mucho encontrar mi primer empleo después de graduarme y, como tenía miedo a perderlo, hacía todo lo que me pedían y más para responder a las necesidades de la organización y mostrar mi agradecimiento.
O tal vez alguien que es autoridad para nosotros nos dijo que debíamos entregarlo todo en el trabajo, por ejemplo, nuestros padres o profesores en la universidad.
Detectar cómo nos hemos apropiado de estas creencias nos ayuda a regresarlas a su dueño y liberarnos de aquello que no nos corresponde o de aquello que ya no queremos que sea verdad para nosotros.
A través de los siguientes pasos te voy a mostrar cómo fácilmente puedes superar tus creencias limitantes, hasta ahora hemos visto tips para detectarlas desde sus orígenes y, a través de ellos, tomar consciencia de los resultados que estamos teniendo en nuestra vida debido a ellas.
Si aún sientes que no eres consciente de esos resultados basta con que te preguntes ¿de qué me estoy perdiendo debido a esta creencia? o ¿qué estoy ganando con esto?
Con la detección y consciencia listas, vamos a superarlas.
- Descubre el beneficio de la creencia. Esto quiere decir, ¿qué recibo a cambio de tener esta creencia limitante? o ¿cómo esta creencia me mantiene a salvo?
Te lo explico con un ejemplo. Si tengo la creencia "todos los trabajos son iguales" y constantemente me estoy quejando de mi jefe (porque todos los jefes son iguales) y no busco trabajo (porque todos son iguales), esta creencia me tiene en una zona de confort.
Si el anterior es tu caso, pregúntate ¿será que tengo miedo a salir y buscar otras alternativas laborales y por eso prefiero quejarme antes que intentarlo y fracasar?
De esto se tratan los beneficios de las creencias limitantes, puede ser que queramos protegernos de un peligro, de fracasar o, por darte otro ejemplo, hacer el ridículo.
Antes de intentar cambiar la creencia limitante es importante que dediques un tiempo a descubrir su beneficio.
- Elige creencias potenciadoras. Para esto te sugiero que antes revises el objetivo que quieres alcanzar a través de las nuevas creencias. Si las anteriores creencias te estaban protegiendo de un posible fracaso, pero te estaban sumergiendo en una vida miserable, en un ambiente laboral tóxico o una relación dependiente, entonces ahora que lo sabes ¿a dónde quieres llegar? ¿cuál es ese objetivo superior?
Ejemplos de objetivos podrían ser:
- Desarrollar confianza en mí
- Mejorar mis relaciones
- Aprender a amar y a amarme
- Cambiar de trabajo
Con el objetivo claro puedes comenzar a reformular tus creencias y convertirlas en potenciadoras, y la clave está en que sean creencias que te motiven, que te lleven al hacer, al merecer, al poder y al querer.
Te pongo ejemplos de algunas:
- Mi vida cambia cuando yo cambio
- Merezco ser feliz
- Merezco todo lo bueno que la vida tiene para ofrecerme
- Merezco amarme y que me amen
- Mi vida tiene sentido
- Disfruto siendo quien soy
- Disfruto plenamente de mis relaciones
- Acepto que cada persona puede pensar de una forma diferente
- Confío en mis decisiones
- Me permito cumplir mis sueños
- Merezco trabajar en un lugar donde me sienta valorado
- Cambia la creencia limitante por la creencia potenciadora y práctica. Seguro no es un secreto para ti, pero te lo recuerdo, "la práctica hace al maestro", y es sólo a través de la práctica, la repetición, que las nuevas creencias se integran.
El tiempo de integración es necesario en tanto para las nuevas conexiones neuronales es esencial la repetición consciente en el tiempo, a través de éstas la creencias potenciadoras se irán instalando en el subconsciente hasta convertirse en un comportamiento, respuesta o pensamiento automático, dirigiendo de esta forma tu vida y los resultados que obtienes.
- Cuida tus emociones en la ruta. Mucho se ha escrito respecto a la relación emociones - creencias limitantes, y puntualmente quiero invitarte a la consciencia de las emociones asociadas a las creencias que, en efecto, te limitan.
Desde mi perspectiva, esta relación es como un matrimonio, y de nada sirve que trabajes en las creencias desde la mente si tus emociones se disparan visceralmente, instintivamente, y sin control.
También las emociones requieren ese estudio, atención y cuidado que sólo tú puedes darle.
Así que para complementar el trabajo que vas a iniciar con tus creencias limitantes con los tips de este post, te recomiendo mi artículo Qué hacer cuando mi jefe me ignora en el que rápidamente reconocerás las creencias que me paralizaban en el entorno laboral y cómo logré gestionar las emociones que me atropellaban.
Verás, fue el sistema de Flores de Bach la herramienta que me facilitó el ponerme en equilibrio para comenzar a trabajar mis creencias y pasar a la acción, como siempre digo, la vida no responde a la inercia y si quieres cambios tienes actuar, y para actuar mejor que hayas hecho frente a creencias y emociones paralizantes.
Conclusión: ¿qué vas a creer a partir de hoy?
Existen muchas teorías sobre las creencias limitantes, algunas hasta te dirán que repetir creencias potenciadoras no servirá de nada. Frente a esto sólo puedo decirte, da un vistazo a tu realidad... ¿te gusta lo que ves? Si la respuesta es un ¡NO rotundo! Comienza a verificar las herramientas y teorías que funcionan para ti, saborea por tu cuenta los resultados.
Y no creas nada, verifica, por favor no te llenes de más creencias.
Henry Ford decía "tanto si piensas que puedes como si piensas que no puedes, estás en lo cierto.
Entonces, ¿qué vas a creer a partir de hoy?
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Rossana Becerra es la creadora del proyecto rossanabecerra.com en el que a través de técnicas para la gestión de bloqueos emocionales y programación de creencias acompaña a mujeres inseguras que buscan recuperar la confianza en sí mismas y con ello desplegar su potencial en todas las áreas de su vida.
En medio de una profunda crisis laboral, Rossana, quien por el año 2015 trabajaba como gerente para una organización humanitaria, decidió buscar respuestas y soluciones. Lo que comparte hoy es todo lo que pudo verificar, lo que funcionó para ella y que finalmente le permitió recuperar su garra y talento, no estaba perdida, estaba dormida.
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