La clave está en vivir, actúar de una manera independiente, que el individuo sienta que tiene el control de su vida y puede realizar el proyecto que se proponga.
La OMS, a pesar de las complicaciones de la vejez (70-80 años), pretende lograr un cerebro sano para toda la vida.
Vejez no es sinónimo de demencia o de dependencia. Existen ancianos saludables.
El Alzheimer, por ejemplo, se debe a componentes neurodegenerativos y genéticos.
Para llegar a una vejez saludable debemos evitar el sedentarismo: comer en exceso por aburrimiento, estar de manera pasiva todo el tiempo tirado en el sofá se convierte en un problema de salud que impacta al cerebro de manera negativa. Estar sentado durante horas por nuestro trabajo reduce el flujo sanguíneo que llega al cerebro y también su actividad cognitiva. Lo ideal es no pasar sentados más de dos horas y levantarse 10-15 minutos para beber agua, comer algo o hacer ejercicio.
La dieta también es un factor importante a tener en cuenta para mantener el cerebro sano. Los alimentos más recomendables son: vegetales, fruta, pescado, aceite de oliva.
Se recomienda la dieta MAIN que consiste en consumir verduras de hoja verde oscuro por su alto contenido en vitaminas, frutos secos que aportan mucha energía (entre ellos el mejor es el arándano). Consumir salmón y sardinas ricos en Omega 3 beneficioso para el cerebro, tomar una copa de vino al día y evitar azúcares y carnes rojas (consumir como mucho dos veces en semana)
La actividad social está entre los consejos para que la mente se mantenga sana: reuniones familiares, con amigos, en el parque con los niños, alternativas on-line o llamadas telefónicas, salir con un amigo… Es decir, todas aquellas actividades que supongan un contacto social y eviten la soledad y el aislamiento.
La estimulación cognitiva ayuda a mejorar la atención, memoria, concentración, capacidad para un rendimiento más alto, para resolver problemas. Existen múltiples maneras de estimular el cerebro todas ellas son neuroprotectoras. Practicar juegos didácticos, juegos de estrategia, jugar a las cartas, al ajedrez, actividades artísticas que desarrollen la creatividad, escuchar música, aprender un idioma…
En resumen y ya para cerrar diremos que para alcanzar un cerebro sano en la vejez basta con seguir la siguiente lista de pasos:
- Ejercicio físico.
- Estimulación cognitiva.
- Mantenerse activo.
- Actividad social.
- Dormir las horas adecuadas.
- Prevenir los factores de riesgo cardiovascular.
- Mantener una dieta saludable.