Cómo tomar las constantes vitales de un perro

Por Massaber Tu Futuro Profesional @MasSaber_es

Si te apasionan los perros, en esta entrada tienes una pequeña guía realizada por nuestra profesora Mónica Sáez para que aprendas a medir las constantes vitales del perro.

1. FRECUENCIA RESPIRATORIA

El tipo de respiración normal es la llamada costo-abdominal. Esto quiere decir que la respiración debe ser tanto torácica como abdominal. Si el animal respira sólo con el abdomen o sólo con el tórax es que hay algún problema.

Podemos valorarla de 2 maneras:

  • Por inspección:

Nos situaremos por detrás del animal y de forma oblicua, y observaremos las respiraciones en el área costal (= zona de las costillas).

  • Por palpación:

Colocamos el dorso de la mano delante de la nariz, sin llegar a tocar y palpamos el aire espirado. Hay que contar el número de inspiraciones o espiraciones efectuados por el animal en el tiempo de 1 minuto.

Los valores normales son de 10 a 40 r.p.m (= respiraciones por minuto). Los animales jóvenes suelen tener valores más elevados.

Existen circunstancias en las que puede haber variaciones en la frecuencia respiratoria como: ejercicio, parto, gestación...

2. FRECUENCIA CARDÍACA Y PULSO

La frecuencia cardíaca la podemos valorar a través del fonendoscopio o por palpación, poniendo el dedo en la punta del corazón. El corazón se encuentra situado entre el tercer y sexto espacio intercostal.

El pulso lo tomaremos por palpación. En perros podemos medir el pulso básicamente en 3 arterias: femoral, radial y carotídea, aunque lo más frecuente es hacerlo en la arteria femoral, que se encuentra en la cara interna del muslo.

Lo ideal sería auscultar al animal a la vez que tomamos el pulso en la arteria femoral, ya que en condiciones normales deben ir parejos, es decir, que debe haber una pulsación por cada latido cardíaco. Los valores normales de la frecuencia cardíaca varían entre 60 y 120 ppm (=pulsaciones por minuto). Los perros adultos suelen tener frecuencias cercanas a las 70-80 ppm, mientras que los perros jóvenes oscilan entre 80 y 120 ppm.

También hay que tener en cuenta la raza, ya que perros de raza pequeña tienen más pulsaciones por minuto e incluso animales mini o toy pueden llegar a las 160-180 ppm sin que sea patológico. Los cachorros pueden llegar a tener una frecuencia cardíaca hasta 200-220 ppm.

La manera de valorar la frecuencia cardíaca es contar el número de pulsaciones que se producen en 1 minuto. Cuando auscultemos a un animal o le tomemos el pulso, aparte de medir la frecuencia cardíaca, hay que valorar el ritmo y la intensidad.

En la práctica, el fonendoscopio lo situaremos en la parte ventral del tórax por detrás del codo.

Cuando se ausculta a un animal, aparte de medir la frecuencia cardíaca hay que valorar las diferentes válvulas. De este modo, las zonas de auscultación en el perro son 4:

  • Mitral: Lado izquierdo a nivel del 5º espacio intercostal en la zona de la unión costocondral.
  • Pulmonar: Lado izquierdo entre 2º y 4º espacio intercostal, por encima del esternón.
  • Aórtica: Lado izquierdo a nivel de 4º espacio intercostal por encima de la unión costocondral.
  • Tricúspide: Lado derecho entre 3º y 5º espacio intercostal cerca de la unión costocondral.

3. TEMPERATURA CORPORAL

La temperatura normal de un perro oscila entre los 38 y los 39 grados centígrados. La manera más fiable de medirla es introduciendo un termómetro en el recto.

Hay que tener en cuenta que pueden existir variaciones fisiológicas durante la gestación, parto, ejercicio, celo y digestión.