Debo decir que nunca jamás tuve las ganas que tengo hoy en día de depositar mi voto en una urna de cara a unas elecciones. Como he comentado en alguna ocasión, el panorama para los espectadores sin cerrazón política es como una especie de Gran Hermano pero desgraciadamente sin confensionario. Rajoy esta semana se encargó de darle un poco más de "vidilla" al asunto con la retirada de la Ley Gallardón contra el aborto.
Yo lamento mucho que los que están en contra del aborto lean absortos mi siguiente comentario pero, debo decir que le agradezco a Rajoy I "El Impasible" este tipo de jugadas políticas puesto que confirman -por si no lo estaba ya- que el programa político del Partido Popular se traspapeló desde el minuto cero y por lo tanto nos queda algo menos de un año para ver que se inventan los populares para enmendar su trigésimo engaño a los que confiaron su voto al programa de cartón piedra de los Populares.
Los pro-vida ahora tienen una única salida digna como es enrolarse en las filas de VOX, pero como en España eso de la honradez y la transparencia política no se estila, deben saber que VOX precisamente no es un mar cristalino donde se aprecia el verdadero fondo del asunto, aunque bueno, al menos serán fieles a su defensa de la vida, tema que VOX ha aprovechado y que Mariano Rajoy les ha colocado en bandeja al dejarlos solos al frente de las formaciones pro-vida.
Desde luego deberán estar contentos en el Partido Popular y la deriva de su Secretario General Mariano Rajoy, que puede estar viviendo sus últimos meses de Presidencia porque desde luego, será un riesgo que alguien vuelva a confiar en sus programas ya que son igual de falsos que un euro de madera o que el propio Rajoy.