Hay unas reglas básicas que no se suelen cumplir cuando compramos unas acciones.Una de ellas sería que el dinero que destinamos a la compra debe ser dinero que no necesitemos. No sirve que no lo necesitamos durante un año, sino que debe ser dinero que nos sobre porque una comprar puede ser para un año pero se puede alargar.Otro aspecto importante es el motivo de la compra. Tenemos que saber el motivo de la compra de la acción. No nos sirve comprar porque alguien nos la ha recomendado y dice que va a subir pero no los motivos que provocarán la subida. Podemos ganar de esta manera pero nuestro objetivo siempre será ganar lo máximo posible con el menor riesgo y con buena información y estudio podemos conseguirlo.
Gráfico Ibex 35
Al saber la causa de la compra sabremos cuando vender.Hay muchos motivos para comprar una acción. Es una buena compañía del sector en el que trabajamos, conocemos su funcionamiento, negocio, donde lo lleva a cabo, la situación económica de esos países, el dinero de caja, sus inversiones... puede ser uno de los motivos.
Siempre comprar en un negocio que conozcamos. Si no tenemos ni idea de eléctricas no te compres iberdrola porque no entenderás el comportamiento de la acción y estarás muy perdido.Hay otro método que puede resultar "cutre" pero funciona. Si el mercado baja mucho, normalmente por miedo o datos malos temporales (por ejemplo, quitan los estímulos algo que a medio/largo plazo es bueno, controlamos varias acciones y cuando la bajada sea muy importante, miramos las acciones que más hayan bajado (siempre acciones solventes tipo Santander, Telefónica, BBVA...) y las compramos. Los rebotes siempre serán mayores en las que más han sufrido.Una última cosa. Si compramos a 6 y consideramos que si llega a 8 vendemos porque es el precio que nos hemos marcado, cuando llegue a 8 vendemos. Es típico pensar que va a subir al infinito, las dejamos, luego baja y nos quedamos con cara de tontos. Más vale pájaro en mano ...