Luis Britto García
UNA CREACIÓN POPULAR“La auténtica independencia o nada, Comuna o nada ¿O qué es lo que
hacemos aquí?”, expresa Hugo Chávez Frías en su primera Consejo de
Ministros del 20 de octubre de 2012. Y en otra oportunidad añade:
“Donde quiera que el Gobierno Revolucionario esté dándole vida a un
proyecto nuevo de corte socialista, ese proyecto debe incluir el
impulso y la conformación de la comuna, o las comunas en su alrededor,
en su cercanía, en su ámbito”. E insiste posteriormente: “La comuna
debe ser el espacio sobre el cual vamos a parir el socialismo. El
socialismo desde donde tiene que surgir es desde las bases, no se
decreta esto; hay que crearlo. Es una creación popular, de las masas,
de la nación”.
PRIMERA FORMA DE ORGANIZACIÓN
La comuna fue la primera forma de organización económica y social, y
preponderó durante milenios. En lo que Marx y Engels llamaron
“comunismo primitivo”, primera etapa de organización de la humanidad,
los medios de producción y el producto pertenecían de manera indivisa
a todos los integrantes del grupo social.
El esclavismo, el feudalismo y finalmente el capitalismo y el
imperialismo se apropiaron de los bienes colectivos y saquearon el
planeta hasta reducir las organizaciones comunales a fenómenos
marginales.
DE LA UTOPÍA A LOS SOVIETS
Pero la idea de la comuna siguió dominando el campo del llamado
socialismo utópico, y está en las bases de la Comuna de París en 1871,
de los primeros soviets o Consejos Obreros y de las Comunas Chinas.
COMUNAS EN VENEZUELA
Nuestras sociedades originarias vivían en organizaciones comunales, y
todavía lo hacen aquellas que no han perdido su identidad.
También fueron comunas la mayoría de las rochelas y cumbes, o
sociedades libertarias de esclavos fugados.
En el Decreto de Haberes militares, mediante el cual Bolívar ordenó en
1817 repartir los bienes confiscados a los realistas entre los
soldados de la Independencia, se establecía que cuando los fundos no
pudieran ser divididos sin perjuicio de su productividad, podían ser
adjudicados en comunidad a varios beneficiarios.
Zamora suspendió el cobro de la renta de la tierra en los sitios donde
ejerció autoridad militar.
Kleber Ramírez, uno de los insurrectos del 4 de febrero de 1992, e
ideólogo temprano del bolivarianismo, propuso el “estado comunero”,
constituido por federación o agregación de comunas.
RECONOCIMIENTO LEGAL E INSTITUCIONAL
Sin embargo, en la Constitución de la República Bolivariana de
Venezuela de 1999 no aparecen previstas las comunas ni el Estado
comunal. En su discurso de juramentación como Presidente de la
República Bolivariana el 10 de enero de 2007 propone conferirles rasgo
constitucional: “Hay que llevar a nivel constitucional el Poder
Comunal, y no llamarlo ‘el sexto poder’, no: es el primer poder, ese
debe ser el primer poder, no el sexto sino el primero, si es que vamos
a darle orden de prelación”. Y cumpliendo con tal propósito, en la
propuesta de reforma de la Ley Fundamental sometida a referendo en
2007 son reconocidas, pero la iniciativa fue derrotada por escaso
margen.
En 2009 se crea el Ministerio del Poder para las Comunas, y en 2010
la Asamblea Nacional Legislativa sanciona la Ley Orgánica de las
Comunas y la Ley Orgánica del Sistema Económico Comunal. En sus
extensos articulados se regulan sus categorías, estructuras y
funcionamiento.
Estas normas sólo reconocen un proceso que ya estaba en marcha. Desde
mucho tiempo antes se habían constituido numerosas comunidades, como
la Comuna Ataroa, que lucha por el acceso al agua y los servicios
desde los años ochenta, el movimiento Alexis Vive en el 23 de enero, y
otras que se crean para gerenciar empresas recuperadas o fundos
expropiados.
Pero a pesar de los pronunciamientos de Chávez, el nuevo sistema no
necesariamente encuentra acogida favorable entre la jerarquizada y
burocrática administración Estatal.
La creación de un Ministerio del Poder Popular para las Comunas en
2009 facilita el pretexto para considerarlas un mero sector
administrativo y no, según lo deseaba Chávez, como base potencial de
la nueva estructura del Estado Comunal. Y así, el propio Hugo Rafael,
en el “Aló Presidente” Teórico N° 1, el 11 de junio de 2009 expresa:
“¿Acaso la comuna es sólo aquello que le corresponde al Ministerio del
Poder Popular para las Comunas? ¡No! El ministerio impulsa, define, se
interconecta; pero señores alcaldes, gobernadores, todos, el pueblo
todo, comunidades todas, vamos a hacer un esfuerzo mayor para que se
multipliquen las comunas”. A pesar de esta arenga, el movimiento
comunal no avanza significativamente, al extremo de que entre 2010 y
2012 sólo se crean 50 comunas. Agendas urgentes, como la violencia de
la oposición entre los años 2016 y 2017 quizá propician que se les
preste escasa atención. Esta situación ha llevado a protestas por
parte de los integrantes de las comunas ante el ministerio respectivo.
Sin embargo, el Presidente Maduro establece en 2014 el Consejo
Presidencial Nacional de las Comunas, y bajo su administración se
crean unas 350 nuevas comunas, Muchas de ellas dependen de los
aportes del Ejecutivo, hasta representar a veces la mayoría de los
ingresos del Banco Comunal, por lo que más que unidades de producción
se convierten en centros de redistribución.
EXPECTATIVAS Y REALIDADES
Hacia febrero de 2017, estimaba Marco Teruggi que en Venezuela
funcionaban unas 1700 comunas. Y añade que “Como todo proceso de
organización popular, las comunas tienen desniveles, tiempos dispares,
diferencias según su relación con el Estado, el acompañamiento o no de
movimientos populares etc. ¿Algunas son maquetas antes que
experiencias reales de autogobierno? Sin dudas. ¿Cuántas son? Difícil
saberlo”.
Señala Teruggi como ejemplo exitoso el desarrollo de la institución en
el estado agrícola de Portuguesa: “En números: para que todo su
territorio -15.200 km2- sea comunalmente cubierto son necesarias unas
130 comunas. En la actualidad existen 110. De esas 110, 64 tienen las
principales instancias de autogobierno constituidas -el Parlamento, el
Banco, la Contraloría, el Ejecutivo. Las demás están en el proceso de
conformación” (Teruggi:
ttps://www.telesurtv.net/opinion/Existen-las-comunas-en-Venezuela-20170215-0027.html)
Katrina Kozarek señala varios ejemplos más de comunas exitosas.
Algunas preceden a los gobiernos bolivarianos, tales como las
comunidades indígenas originarias y el movimiento Alexis Vive, en el
23 de Enero. Con el bolivarianismo surgen, entre otras, la Comuna El
Maizal, instalada el año 2000 en terrenos expropiados. La Comuna José
Pío Tamayo, que se establece hacia 2012 en tierras que la cervecera
brasileña Brahma había abandonado, y en las cuales comienza la
producción de cebada para extenderse luego a otros ramos agrícolas. La
Comuna Negro Miguel, entre los estados Lara y Yaracuy, en terrenos
del fundo pecuario abandonado La Horqueta (Kozarek, Katrina:
Venezuela’s Communes: a Great Social Achievement, CounterPunch, 24 de
noviembre de 2017). Hasta ahora, siguiendo el requisito de adscripción
a una localidad geográfica, la mayoría de las comunas se han creado en
el ámbito rural. Ello no garantiza una continua expansión, en un país
en el cual cerca del 95% de la población es urbana.
El problema fundamental del socialismo es el de la propiedad de los
medios de producción. Mientras ésta siga estando esencialmente en
manos de la empresa privada y del Estado, las comunas no podrán
desarrollar todo su potencial. Problema decisivo, en un país sometido
a implacable agresión y bloqueo, dirigidos a quebrantar el suministro
de alimentos y otros insumos básicos, y con ello la resistencia de la
población.
brittoluis@gmail.com