Ciudad del Vaticano, 12 de febrero 2012 (VIS).-Sigue el comunicado facilitado esta mañana por la Oficina de Prensa de la Santa Sede acerca de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP).
“El cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado, ha recibido esta mañana a Don Marcial Rubio Correa, Rector de la Pontificia Universidad Católica del Perú (PUCP)”.
“El Secretario de Estado ha hecho referencia al asiduo y generoso empeño con el que varios exponentes de la Universidad se dedican a la formación cualificada de los estudiantes, así como a la amplia gama de disciplinas que la PUCP ofrece a los jóvenes. A continuación el cardenal Bertone ha comunicado al rector Rubio Correa las conclusiones a las que ha llegado la Santa Sede después de un intenso diálogo y de numerosos encuentros llevados a cabo en el arco de muchos años entre el actual Gran Canciller, sus predecesores y la Universidad, como también durante la visita apostólica a la misma, realizada por el cardenal Peter Erdö, arzobispo de Esztergom-Budapest, los días del 5 al 11 de Diciembre de 2011”.
“Dichas conclusiones han tenido en cuenta, de manera particular, los resultados de la visita apostólica y la propuesta, presentada por el Rector al final de la misma”.
“El Secretario de Estado ha notificado al rector Rubio Correa la petición de la Santa Sede de que los estatutos de la PUCP sean regularizados cuanto antes, adecuándolos a la constitución apostólica 'Ex Corde Ecclesiae' para el bien de la misma PUCP y de la Iglesia en Perú”.
“Dada la importancia evidente de salvaguardar la identidad católica de la Universidad, el Secretario de Estado ha pedido consiguientemente que las autoridades académicas competentes presenten, antes del próximo 8 de abril, domingo de Pascua, los estatutos con las enmiendas indicadas a la Universidad el 16 de Julio de 2011, para su aprobación”.
“Por último, el cardenal Bertone ha expresado su deseo de que la comunidad académica acoja cuanto señalado, de manera que la PUCP pueda realizar cada vez más su misión de ofrecer a las nuevas generaciones una sólida formación, enraizada en la fidelidad al Magisterio de la Iglesia, como garantía de la gran contribución que la Universidad está llamada a ofrecer al país”.