Maryclen Stelling
En el centro del conflicto y la polarización, de la confrontación y la violencia se ha ido configurando un espacio ciudadano, suerte de comunidad de comunicación que apuesta al diálogo.
PublicidadEl país se encuentra sometido a diferentes manifestaciones de la violencia – geopolítica, económica, política, social, institucional; penitenciaria, entre bandas; psicológica, simbólica y transmediática. A ello hay que agregar la virulencia del Covid-19 que obliga al confinamiento, no reconoce fronteras y borra los límites entre las naciones. Plantea con urgencia la necesidad de una estrategia compartida que requiere de la integración internacional. En nuestro caso, a este marco violento se suma la reciente y fracasada incursión militar denominada Operación Gedeón, que prende las alarmas en torno a un intencional conflicto bélico en el país.
La comunidad de diálogo, en proceso de formación en el país, está procurando una vía democrática de entendimiento que requiere la participación de todos los actores de la sociedad. Se pretende el fortalecimiento de una sociedad solidaria, harmoniosa en sus diferencias y especificidades. Se persigue por tanto, la consolidación de una comunicación que promueva una nueva narrativa de paz, con especial énfasis en la reconstrucción del tejido social, las organizaciones sociales, el desarrollo y fortalecimiento de vínculos basados en la confianza. Se propulsa entonces un proceso democrático, integrador y de entendimiento que, desde las diferencias políticas, nos convoque a todos y todas.
En este contexto pandémico, el aislamiento ha impulsado tanto la comunicación interna como la internalización de esta naciente comunidad de dialogo y comunicación, a través de “telereuniones” y seminarios impartidos en línea (webinars), que alertan sobre la profundización de la crisis sistémica, los riesgos para la democracia; orientan el trabajo por la paz y los derechos humanos; plantean los derechos del medio ambiente y discuten el conflicto, la negociación y la mediación. La comunidad internacional de dialogo y comunicación facilita conocer y aprende de otras realidades, visiones y fortalezas. Nos permite pensar en función de la totalidad del todo.
Se trata de abordar los conflictos desde la mirada de una comunidad internacional de dialogo y comunicación, con voluntad democrática en la procura de soluciones a la crisis sistémica.
@maryclens