Queremos que haga algo, pero sólo conseguimos confundirlo. El problema está en la transmisión. Si no queremos que haga algo, lo mejor y más sencillo es enseñarle a hacer lo que queremos que haga. En vez de intentar disuadirle de maneras rocambolescas de que desista de lo que hace, sin entender por qué ya que él actúa conforme a lo más sencillo y natural para él, sin entender de etiquetas humanas, lo mejor es indicarle qué queremos que haga. Y punto. Así conseguiremos la conducta deseada. Haciendo eso dejará de hacer lo que acostumbraba.
Queremos que haga algo, pero sólo conseguimos confundirlo. El problema está en la transmisión. Si no queremos que haga algo, lo mejor y más sencillo es enseñarle a hacer lo que queremos que haga. En vez de intentar disuadirle de maneras rocambolescas de que desista de lo que hace, sin entender por qué ya que él actúa conforme a lo más sencillo y natural para él, sin entender de etiquetas humanas, lo mejor es indicarle qué queremos que haga. Y punto. Así conseguiremos la conducta deseada. Haciendo eso dejará de hacer lo que acostumbraba.