La semana pasada Joaqui llegó del cole con una bolsa grande pero liviana. Cuando la abrí, me encuentro dentro... lana tal cual sale de la oveja recién esquilada!! Hasta olor a oveja tenía!! Yo no entendía nada (este cole no deja de sorprenderme), y Joaqui que me repetía que tenía que lavarla para hacerle un almohadón...
Me puse en contacto con una mamá del cole, que fue ella misma alumna Waldorf, y me explicó que era tal cual me explicaba Joaqui: en Labores hace un tejido tipo crochet con los dedos, y luego la maestra los ayuda a hacer un almohadon para su silla, al que le aplican ese tejido. La lana era para el relleno del almohadón. Así que, como era un hermoso día, subimos a la terraza y nos pusimos manos a la obra.
Sacamos la lana de a poco, sacamos las basuritas, pastitos y palitos que tenía, y la pusimos en un balde...
La lavamos con jabón blanco (que hacemos en casa con aceite usado)
Enjuagamos y pusimos a secar (con las perras enloquecidas al lado por el olor a oveja y Mai tomando solcito detrás)
Y así de blanca quedó nuestra lana, que después abrí con los dedos, quité los nudos y devolví al cole.
Ya les mostraré el almohadón cuando esté terminado...