Apareció por primera vez en la tele como concursante del Un dos tres de Mayra donde le tocó una Botilde.Empezó de la mano de Jesús Hermida en A mi manera hasta que llegó María Teresa Campos a TVE y se llevó a Concha a Pasa la vida.
Pero cuando se canceló el programa su carrera empezó a desbarrar. Aceptaba cualquier mierda que le propusiesen.
Fue la reportera de exteriores de ¿Qué apostamos?; presentó con Ramón García y Jose Toledo el programa vespertino Tardes de Primera (la versión matinal la hacía Laurita Valenzuela y Tate Montoya) que fue un fracaso estrepitoso; y hasta tuvo un programa propio.
A mediados de los 90 condujo ¡Vaya lío!, un programa también de tarde donde dos personas discutían sobre un tema. Que si el tabaco, que si el sexo, que si la brujería… Todo valía en este magazíne que competía con “Ana”, de Ana García Lozano.
Pero nada, no triunfaba ni queriendo, pero ahí seguía. Hasta volvió a trabajar con Ramón García en La llamada de la suerte, un programa de prime time donde hacía las veces de Ana Obregón como palmera del presentador estrella. Fue entonces cuando empezó el ocaso de su carrera.
Tras años en el ostracismo, presentó con un desconocido Jaime Cantizano “Cada mañana” en Localia, sin mayor trascencencia que la que nosotros le podemos dar.
Desde ahí, desandar lo andado era ya coser y cantar, pues ya poco le quedaba para caer más bajo. A una simple comparsa de Terelu en Locos x Madrid.
A partir de ahí su carrera se ha vuelto difusa hasta desaparecer del mapa. Se buscó la vida y se hizo Comunity manager o algo así.