Mucha era la expectación por ver al profeta, Chuck Prophet, en directo en la capital. Entradas agotadas desde hace días en una Sala tan especial como la Sol madrileña. Chuck es un veterano maestro del nuevo rock americano de los 80, desde su época con Green On Red, hoy banda de culto, pero se lleva reivindicando desde hace ya unos añitos con discos de una valía incontestable. Ya en 2007 con Soap and water y en 2009 con ¡Let Freedom Ring! dejó claro que la calidad poética y melódica de esos trabajos, le devolvían al primer plano por derecho propio. Después su homenaje al London Calling de los Clash, donde lo bordó.Por si fuera poco, sus dos últimos trabajos lo evelan ya a la categoría de mito actual, Temple beautiful es una obra maestra incontestable, y este Night Surfer me enganchó desde la primera escucha y parece que puede incluso superar a su predecesor.
En esta gira se hace acompañar de una banda llamada The Mission Express, ¡menuda pedazo de banda!, compuesta por un fino bajista, un batería que es una auténtica bestia parda y un guitarrista que hizo las delicias de todos los presentes con sus punteos, tanto con slide, como al natural. Pero amigos y amigas, Chuck en vivo demostró anoche muchas cosas, primero su excepcional momento de forma, luego su vigor en directo, su buen rollo, su manera tremenda de tocar la guitarra, y ojo, su perfecta conjunción y compenetración con su banda. Esa voz que por momentos me recuerda a Ray Davies, esa manera de rockear, esos pasajes que durante el concierto te hacen levitar, porque hay una cosa indiscutible en el bagaje de Chuck, y es que tiene CANCIONES, y encima las defiende de vicio.
Abrió el amigo Chuck con una atronadora versión de Lou Reed del Rock and roll heart.De su último trabajo Night surfer sonaron Countrified Inner City Technological Man, Wish me luck (qué maravilla por dios con la intro previa de Lodi de la Creedence), Ford Econoline, Guilty as a Saint y Truth will out (Ballad of Melissa and Remy). De su joya Temple beautiful cayeron Little girl, Little boy, Castro Hallowen (alucinante), Temple beautiful (con la sala cantando a coro), Who shot John, White night, big city, The left hand and the right hand y Willie Mays is up at bat.De las antíguas pudimos escuchar Summertime thing de aquel disco de 2002 No other love, You did (Boomp Shooby Dooby Bomp) de aquel Age of miracles de 2004, que fue el segundo y último bis que me dejó en estado de levitación. Just to see you smile completaba el setlist.De las versiones, a parte de la inicial de Lou Reed, hicieron Bangkok de Alex Chilton, Different Drum de Michael Nesmith y el Shake some action de los Flaming Groovies que fue el primer bis.
Hacía mucho tiempo que un concierto de rock and roll no me renegeraba tanto por dentro, y os puedo asegurar que lo de anoche me ha encendido hasta la última luz que tenía apagada.Al finalizar el concierto me encontré con el gran Santiago Segurola con la misma cara de emoción que yo, y comentamos la grandeza de lo visto, y me dijo "un concierto como los de antes"... pues si, memorable. Os dejo con ese You did (Boomp Shooby Dooby Bomp), interpretado hace dos años, muy parecido a como sonó anoche.