Si uno fuera egocéntrico, podría pensar que Javiera Mena leyó nuestra crónica de hace casi un año y que quisiera satisfacernos personalmente; para nada creemos que fuera así, pero en todo caso nos supuso una subida de varios puntos en nuestra percepción positiva de este concierto que Javiera dispusiera “Que me tome la noche” (grabamos un fragmento que les hemos insertado arriba de este párrafo; no se pudo grabar completa porque la batería no quiso más) y acto seguido “La carretera” (no en vano, comentamos nuestra asistencia al evento mencionando parte del estribillo de la canción en las redes sociales horas antes). Con estas 2 canciones, la fiesta se despendoló. Todo el mundo no paraba de dar botes, y es que estos 2 temas son perfectos para provocar la histeria en el tramo final de un concierto. Tremendo acierto y más en una actuación ante tanta gente.
Si uno fuera egocéntrico, podría pensar que Javiera Mena leyó nuestra crónica de hace casi un año y que quisiera satisfacernos personalmente; para nada creemos que fuera así, pero en todo caso nos supuso una subida de varios puntos en nuestra percepción positiva de este concierto que Javiera dispusiera “Que me tome la noche” (grabamos un fragmento que les hemos insertado arriba de este párrafo; no se pudo grabar completa porque la batería no quiso más) y acto seguido “La carretera” (no en vano, comentamos nuestra asistencia al evento mencionando parte del estribillo de la canción en las redes sociales horas antes). Con estas 2 canciones, la fiesta se despendoló. Todo el mundo no paraba de dar botes, y es que estos 2 temas son perfectos para provocar la histeria en el tramo final de un concierto. Tremendo acierto y más en una actuación ante tanta gente.