Carlos Cros, acompañado de Sito Díaz ( en Los 400 Golpes y ex- Fine!), nadaban contra corriente, con un público más bien desconocedor de su músico, cosa que este animalazo de escenario, que utilizo su brutal carisma, para ponerse a todo el mundo en el bolsillo (vía Morales, que al final se portó bien, o más de lo esperado).
El concierto, aunque fuera en acústico, fué todo rock',n'roll, tanto en actitud como en general. Sonaron canciones que estarán en su nuevo disco como La Distancia, Nadie como tú, Nadie Se Resiste Al Amor, y la que hizo corear a los presentes subido en una silla en el centro del local, la espectacularísima No Más Lagrimas.
Versionó de forma personal el Mediterráneo de Serrat, y remato un concierto histórico que espero que quede por mucho tiempo en la retina de los que asistieron a él, recuperando a Selenitas con ese clasicazo (telúrico también) Los años que nunca volverán, que me transportó a otras épocas y/o tiempos mucho mejores.
Con la emoción del momento, y alguna que otra copa de más, no hicimos ni fotos ni vídeos del meollo en si, pero valgan estas de la prueba de sonido y esta de servidor con el artista, en un momento post-concierto, que a pesar de mi jeto me lanzo a publicar a pesar de todo. Gracias desde aquí a estas dos personas geniales y músicos excelentes.