Concluye la Guerra de Irak y, con ella, el sueño de una Irak libre: 31/05/1941

Por Lupulox


Soldados británicos contemplan Bagdad, que de nuevo tienen entre sus manos.
Camaradas,
Durante la mañana de hoy, 31 de mayo, el Alcalde de Bagdad y una delegación iraquí se han aproximado a las fuerzas británicas que en este momento se encuentran sobre el Puente Washash, a las afueras de Bagdad. Con el Alcalde se encuentra Sir Kinahan Cornwallis, el Embajador Británico que había estado recluido en la Embajada Británica de Bagdad durante las últimas cuatro semanas, cuando dieron inicio las hostilidades. Los términos del armisticio han sido alcanzados con rapidez, tras la marcha ayer del Primer Ministro Rashid Ali y de gran parte de su Gobierno, e Irak ha firmado una vez más, con ojos tristes, su sumisión al Imperio Británico.
Un vehículo blindado detenido en la cuneta a la espera del resultado de las negociaciones.
Movimientos tácticos de la campaña.  Se incluye el avance de las tropas indias desde Basora a lo largo del mes de junio.
La única concesión que parecen haber hecho los británicos ha sido la de no ocupar la capital de Irak de inmediato. La realidad es que si han aceptado este atenuante, no ha sido por otro motivo que el de que las fuerzas iraquíes en los alrededores de Bagdad todavía sean mucho más numerosas que ellos y prefieran disfrazar su debilidad. Abdul Illah regresará mañana a Bagdad como Regente y la monarquía y un gobierno pro-británico será puesto de nuevo a la cabeza del país. Jamil al-Midfai, un anglófilo patológico, se perfila como nuevo Primer Ministro.
Soldados británicos durante la guerra que ha terminado hoy.  En breve saciarán su sed de sangre en Siria.
Las pérdidas en la guerra ascienden, por parte iraquí, a 500 soldados muertos y 1.250 heridos, además de la totalidad de la fuerza aérea iraquí, 17 aviones alemanas y 3 italianos.  Los británicos, por su parte, han lamentado la muerte de al menos 60 soldados y 28 aviones. La sangre derramada de los iraquíes todavía está caliente cuando el Imperio Británico se ha puesto en seguida a afilar sus garras. Con Irak sometida de nuevo a su arbitrio, la Siria y el Líbano de Francia Vichy, por su colaboración con el Eje tras permitirle atravesar su territorio por vía aérea y terrestre en ruta hacia Irak, podrían ser las siguientes naciones en sentir el peso del Imperio Británico y hacerle extender todavía más los tentáculos de su opresión.
Dos Quisling -como gustan decir los Aliados- árabes: soldados de la Legión Árabe; colaboracionistas con el Imperio Británico.
Soldados del Imperio Británico custodian una refinería de petróleo iraquí.  La plutocracia británica sonríe tras haber conseguido mantener su control sobre el oro negro de Irak, una situación que a buen seguro volverá a repetirse a lo largo de la historia.
Termina así la breve libertad del pueblo iraquí. Un feliz episodio que se ha prolongado durante apenas dos meses durante los cuales Irak ha sido capaz de desprenderse del yugo británico y desarrollar su propia identidad. Sin embargo, la Providencia ha querido que esta aventura no haya durado mucho. Por delante de Irak se extiende un largo periodo de decadencia y sumisión al poder británico y por ende, capitalista. De ahora en adelante, y hasta que se agoten sus pozos petrolíferos, Irak será para el gran patrón oro una mera colonia abastecedora de crudo. Y, ¡ay del que se atreva a amenazar este estado de cosas! Todo el peso de la confederación capitalista caerá sobre ella para volverle a hacer entrar en vereda. Todo ello, claro está, siempre que Alemania no consiga alzarse triunfante esta guerra –que lo hará- y Erwin Rommel termine desfilando triunfante en El Cairo –que lo hará- y los Panzer rueden a través de las arenas de Oriente Medio –que lo harán- liberando a todos los pueblos oprimidos y dando inicio a la paz, la prosperidad y la libertad del Nuevo Orden Nacionalsocialista que Adolf Hitler, ese Mesías que Dios nos ha regalado, ha proyectado para Alemania y para el mundo.
Es lebe Irak!Es lebe Nationalsozialismus!