sigo en este antro
de corcheas y paréntesis
afiladas notas mancilladas de tresillos
lupanar de letras que me da el abecedario
escribo un yo iracundo
con manos desgarradas
construyo esta condena de versos
que se erigen en barrotes
esta celda de hojas blancas
siempre lleva uniforme de reo
me espera a toda hora
para tatuarle una historia