Las confesiones de una heredera con demasiado tiempo libre que dan título al libro vienen a ser un compendio de las treinta y cuatro misivas que la protagonista dirige a su Querida Edwina. Este formato epistolar, utilizado por Jane Austen en Lady Susan y por otros autores ya clásicos como Francis Burney (Evelina), Pierre Choderlos de Laclos (Las amistades peligrosas) o Constance de Salm (Veinticuatro horas en la vida de una mujer sensible), resulta particularmente atractivo y centra la perspectiva de la historia en un único punto de vista, el de la redactora de las cartas. Es evidente que solo a través de la autora de las confesiones podremos conocer a los demás personajes y ser testigos de las diversas situaciones que se van sucediendo. Pero muy pronto conoce el lector de qué pie cojea la heredera.
La protagonista-narradora de la historia, Lady Hawthornetone Wiiliamsmith, es una joven de dieciocho años, en edad casadera por tanto, con pretensiones y claras inclinaciones, respaldadas por la familia, a que el feliz acontecimiento de su boda se produzca lo antes posible. Vive con su peculiar familia en Paisley Manors rodeada de un sin fin de servicio atento a todas y cada una de sus numerosas necesidades. Las visitas, la liturgia del té, los bailes, cotilleos y la búsqueda de un futuro marido son la esencia de su lánguida existencia que, aunque con momentos de mortal paz, vive con alegría y cierta trascendencia. La hija del vicario vendrá afortunadamente, para ambas, a paliar en gran medida esta ociosidad dando a nuestra heredera, cual austeniana Emma Woodhouse, la excusa perfecta para convertirse en experta asesora en moda, literatura y relaciones y modos sociales. Así, entre su nueva labor de mecenas, los bailes de la nueva temporada social de Langfalls Upon Avon, la rivalidad con su "queridísima amiga Agnes" y los pretendientes varios que van surgiendo, con mayor o menor éxito, el tiempo va pasando de manera más ocupada y dando oportunidad al romance.
Belén Barroso ha pretendido crear una obra ligera con vocación de entretener y lo ha conseguido. Su novela es un ameno divertimento que ofrece una lectura agradable y divertida envuelta, además, en una preciosa edición con ilustraciones de estilo vintage.