Como su nombre indica, es un estilo que aprovecha el momento de un valor; es decir sigue la tendencia dominante.
Las dos cifras que siempre debemos comprobar en nuestro estilo de inversión en bolsa son
- el porcentaje de aciertos
- el ratio promedio de beneficios dividido promedio de pérdidas
Ambos ratios son interdependientes:
Si acierto a menudo en mis operaciones, (que es lo habitual en sistemas de reversión a a la media) normalmente es porque vendo rápido las operaciones en beneficios, es decir el ratio beneficio/perdida es bajo, en torno a 1 o 1 y pico.
Ambos ratios nos indican la expectativa matemática de nuestro sistema, que debe ser necesariamente positiva. (ver anterior artículo)
Normalmente, aguantaremos mayores pérdidas en sistemas de momento para intentar “subirnos a la ola”, es decir coger una tendencia sostenida durante mucho tiempo y tener un beneficio fuerte. Es decir, en métodos de momentum dejamos correr los beneficios, cortando rápidamente las pérdidas.
Como dicen los anglosajones:
The trend is your friend. (La tendencia es tu amiga).
En la mayoría de los sistemas de trading debemos operar con stops de pérdidas y stops de beneficios claros. El sistema momentum tendrá un stop de pérdidas no demasiado lejano, y el stop de beneficios suele ser un stop ascendente, un trailing stop.
Todo es cuestión de números
La consecuencia de tener un stop de pérdidas relativamente corto y un stop de beneficios largo es obvia: tenemos bastantes fallos (porcentaje de aciertos bajo) pero cuando cogemos bien la tendencia, ganamos mucho (ratio beneficio / perdida alto)
Siguiendo la fórmula de expectativa matematica, vemos que podemos ganar lo mismo con un método que con otro: (todos los datos son en tanto por uno)
En la primera columna, el primer sistema acierta un 64% de veces, y gana un 5% más en los beneficios que en las perdidas.
En la segunda columna, el sistema tendencial solo acierta un 42% de las veces, pero gana más del doble en los beneficios que lo que pierde en las pérdidas.
Sin embargo ambos sistemas tienen una rentabilidad idéntica en relacion al riesgo. Los números nunca mienten; cualquiera de los dos sistemas nos van a dar dinero.
Sin embargo, hay que interpretar los números.
La dificultad de los sistemas tendenciales
¿cual de los dos sistemas deberíamos elegir?
Hace ya bastantes años que decidí que yo usaría sistemas de reversión a la media.
¿Por qué?
Fundamentalmente por su alto porcentaje de aciertos. Acertar a menudo significa vivir mas contento. Sufrir menos.
Porque la realidad es que cualquier sistema encadena rachas de pérdidas que son siempre dolorosas. Tanto más cuanto más profundas y largas sean.
Y lógicamente, los sistemas tendenciales fallan más. En el ejemplo, el sistema de reversión falla el 36% de las operaciones (1 – probab. acierto) y el sistema de momento falla el 58% de las operaciones:
Por lo tanto, ¿cual es la probabilidad de encadenar una dura racha de pérdidas?
La reversión a la media encadena 5 fallos un 0,6% de los días. Esto significa 1 día cada 166 días de mercado. Un poco menos de 1 año (unos 10 meses)
El sistema momentum, encadena 8 pérdidas consecutivas el 1,3% de los días. Esto significa 1 día cada 77 días de mercado. Un dia cada 4 meses. O lo que es lo mismo, 3 veces al año.
¿Y cuanto pierden? lógicamente, depende del promedio de pérdida de cada sistema. Supongamos por ejemplo, un 5% de pérdida promedio en ambos sistemas.
En el 2ª caso el sistema tendría una racha del -34%, (0,95 ^ 8) aproximadamente 3 veces al año.
Este es el promedio, claro.
Pero la diferencia es muy importante. El segundo sistema te tortura 3 veces por año, y el primero sólo una vez, y con caídas más llevaderas.
De hecho, las curvas de beneficios de un sistema momentum suelen estar repleta de grandes picos y valles, a diferencia de los de reversión a la media, que son más suaves.
Hay otra característica importante con los sistemas tendenciales: Al final de la tendencia, hay que devolver al mercado una buena cantidad de lo ganado.
Cuando estamos en una tendencia, sólo se vende porque ha tenido una corrección de cierta importancia.
Psicológicamente esto suele ser también difícil de asumir.
Conclusión.
Por tanto, para operar este tipo de sistemas, hay que tener muy claro:
- Establecer con claridad los stops
- Estudiar el nivel máximo de las correcciones que provocan la venta
- Seguir nuestras normas, dispuestos a devolver parte de lo ganado
- Tener rachas frecuentes de pérdidas
- Ganar mucho beneficio con unas pocas operaciones muy rentables
Como comentaba antes, a mi estas características no me entusiasmaban asi que me decanté sobre todo por sistemas de reversión a la media, que son los que aconsejan algunos de mis autores preferidos.
Pero debo confesar que actualmente no lo tengo tan claro. A veces, coger una buena tendencia y ver cómo va creando beneficios sin hacer ninguna compra-venta puede ser más gratificante que tener muchas operaciones mediocres.
En realidad, todo depende.
En regímenes bursátiles laterales, pueden ser mejores los sistemas de reversión.
En momentos claramente alcistas o bajistas, son mejores los sistemas tendenciales.
Asi que si entendemos bien la filosofía de nuestro sistema momentum, podemos ganar mucho dinero con él. Pero también con los de reversión.
Como siempre digo, la clave, el centro, la verdadera obsesión de un inversor en bolsa es: saber lo que se hace.
Te podrá ir mejor o peor, ganar o perder pero, conociendo profundamente tus métodos, estarás al mando de tus inversiones.
Espero que estas ideas te ayuden a ello..
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