Consejos básicos para el mantenimiento de las piscinas de fibra

Por Matias Vega

En principio, hay que tener en cuenta que los consejos para el mantenimiento son comunes, independientemente del material del que esté fabricada la nuestra. En concreto, las de fibra de vidrio si se diferencian por algo es porque son más cómodas de cuidar, ya que se trata de un material en el que es más difícil que se asienten y desarrollen las algas y otros microrganismos.
Estas piscinas, sin embargo, precisan unos cuidados mínimos que hay que propiciarles de forma regular. Una de las zonas más delicadas son los laterales, más propensos a la acumulación de suciedad. Por tanto, en estas zonas incidiremos en la limpieza. Ten en cuenta que con el tiempo la suciedad puede llegar a deteriorar el propio material de las paredes.
Entre los utensilios indispensables está el hacerse con un limpiafondos. Aunque hay modelos manuales, merece la pena invertir en uno automático. Son muy eficaces y, por descontado, nos ahorran mucho tiempo y esfuerzo.
Otro de los aspectos a los que debemos prestar atención es el de los productos químicos que se usan para el mantenimiento de la piscina. Siempre debemos fijarnos en que sean específicos para las de fibra de vidrio, si no se podría dañar el material.
Un último consejo, las piscinas de fibra de vidrio no se deben vaciar. La forma más segura de que nos duren muchos años sin necesidad de reparaciones es que las dejemos con agua durante todo el año, aplicando medidas de mantenimiento adecuadas. Se evitan problemas de agrietamiento o fisuras.