Consejos para conservar las hierbas aromáticas frescas

Por Hierbabuenaypimienta
Hoy os voy a comentar unos truquillos para tener siempre a mano hierbas aromáticas en vuestra cocina.
Podemos optar por diferentes métodos:
1.- Si simplemente nos interesa conservarlas frescas por espacio de una semana, nos bastará con envolverlas en papel aluminio o plástico transparente, y guardarlas en el frigo.
Para una conservación más duradera podremos optar por la congelación o su secado.
2.- Para mantenerlas congeladas haremos lo siguiente: 
  • Las lavaremos y picaremos finamente.
  • A continuación, cogeremos una bandeja para hacer cubitos de hielo y las iremos colocando en los huequecitos.
  • Las cubriremos con un poco de agua, e introduciremos en el congelador.
De esta forma, su utilización será muy sencilla: cuando las necesites, simplemente tendrás que sacar los cubitos necesarios y agregarlos durante la preparación del plato. No obstante, deberemos tener en cuenta que la congelacón tiende a dar un ligero sabor amargo a las hierbas, por lo que será conveniente echar una cantidad de hierbas congeladas menor que si se tratase de frescas. 3.- En cuanto al secado. Hay dos opciones: al aire o al horno.a) Al aire:
  • Secaremos las hierbas atándolas y colgándolas en ramilletes boca abajo o, extendiéndolas sobre un papel o tela, preferentemente de algodón, en un estante o repisa. Será necesario rotarñas todos los días para que se ventilen bien. Este proceso durará entre 7 o 20 días hasta lograr un completo secado.
  • Es importante tener en cuenta dónde llevaremos a cabo este proceso de secado, pues debe ser un lugar más bien oscuro, ya que la luz altera los componentes de las hierbas; asímismo, no debe ser, ni demasiado cálido, ni demasiado frío, y estar ventilado para el adecuado secado y evitar que surjan hongos.
B) Al horno:
  • Para secar las hierbas al horno, las lavaremos y secaremos suavemente.
  • A continuación, colocaremos las ramitas u hojas sobre papel de cocina, encima de de un plato e introduciremos en el microondas durante 2 minutos a temperatura máxima.
  • Si optamos por un horno clásico, las colocaremos sobre una rejilla cubiertas con papel de aluminio. Introducimos al horno a una temperatura de 50º durante 2 horas, manteniendo la puerta del horno entreabierta.
Ya optemos por un secado al aire u al horno, estarán listas cuando, al tocarlas, las notemos crujientes y con una textura similar al papel.
Una vez secas, lo mejor será mantenerlas en frascos herméticos o hacer ramilletes y colgarlas en un lugar seco y ventilado. Así podremos usarlas para decorar nuestros platos ;)