Ya que el aseo del bebé es un aspecto muy importante, hay que hacer una buena selección de la bañera del bebé, y para ello hay que elegir entre la gran cantidad de utensilios existentes en el mercado.
La bañera del bebé ha de ser cómoda para los padres y para el bebé. Lo ideal es contar con una bañera con un soporte que permita dejar los brazos libres para asear con mayor comodidad al bebé, muchísimo mejor que sostener al bebé ya que puede tener su peligro.
Se recomienda una bañera de polipropileno con una buena estructura estable y resistente que garantiza la higiene del bebé. La forma de la bañera tiene que ser anatómica para facilitar la posición del bebé. Si tiene un orificio en el fondo para su desagüe mejor, con tubo y tapón con cierre hermético.
Existen varios tipos de bañeras para bebés: las que se adaptan a la bañera de casa, las que sed apoyan sobre cualquier superficie estable horizontal, las hinchables, las que tienen con estructura de apoyo y soporte plegable, las bañeras tradicionales y anatómicas. Incluso una buena idea son los muebles bañera, en que se pueden guardar todas las cosas del bebé, o las bañeras-cambiador plegables aunque esto es mejor como cambiadores que como bañeras.
Las bañeras para bebé plegables son buenas para guardar y transportar, las de niños y bebés pueden durar más tiempo. Lo importante es elegir algo bueno para el bebé y cómodo también para los padres, muy segura, y que le ayude a bañarse al menos los primeros 6 meses o hasta que pueda hacerlo en una bañera grande. Entre los diversos tipos de bañeras se debe elegir el mejor, así que hay que meditar la decisión.