El estrés es un factor que influye en gran medida en el desarrollo de gran cantidad de enfermedades y afecciones, por lo que resulta sumamente importante conocer cómo reducir el estrés para proteger nuestra salud.
En algún momento de nuestra vida, todos hemos sentido que estamos estresados, y esto se debe a que estamos en un estado de ansiedad, muchísima tensión, y nerviosismo, y este estado puede ser producido por exigencias, obligaciones o problemas en el trabajo o en los estudios, así como problemas personales que pueda tener el individuo en su vida cotidiana. El estrés normalmente puede producir desesperación, temor o ira, así como dar la sensación de que la situación por la que se está pasando en ese momento, no tiene remedio, lo cual es totalmente falso. De igual forma puede provocar que a la persona cueste mucho más conciliar el sueño por las noches, que le de dolor de cabeza, dolor muscular, ansiedad, que le duela la espalda o el cuello, e incluso, el estrés en muchas ocasiones puede producir depresión. En algunas situaciones, al pasar por tanto estrés, las personas suelen acudir al cigarrillo, al alcohol o a las drogas, aumentando su consumo, y por ende, se hacen aún más daño.
El estrés es relativo, es algo realmente muy individual, puesto que quizás tú sientas que una situación es estresante, y para otra persona la misma situación puede no preocuparle en lo absoluto. Un ejemplo de ello es el manejo de carros; puede que una persona se encuentre tensa mientras está conduciendo un carro, mientras que para otra persona esto produce muchísima relajación e incluso placer. Algo que a ti o a cualquier otra persona les produce temor, probablemente sea divertido para otras personas. Así mismo, otro ejemplo claro es en el trabajo; si una persona asume un nuevo cargo o algo que requiera mayor responsabilidad y compromiso, puede sentir gran tensión y estrés; mientras que por el contrario, para otra persona enfrentarse a esta misma situación puede ser algo que disfrute, pues representa un reto que debe cumplir. Es por eso que no es posible afirmar que algo es estresante, o malo, ya que cada quien es diferente y no a todos las mismas cosas les producen estrés.
Por otro lado, no todo el estrés es malo. Aunque no lo sepas, algo tan simple como hablar en público, o ver un partido de fútbol, produce un pequeño grado de estrés, pero resulta divertido. La clave de todo está en saber manejar el estrés de forma correcta, ya que de lo contrario podría causarnos serios problemas de salud. Muchísimos estudios confirman que una cantidad elevada de estrés en la persona puede ocasionar alteraciones y daños en el organismo.
El cortisol es una de las hormonas principales en el estrés, puesto que esta ayuda a que se regule la presión arterial, a que se controlen las horas de sueño, a regular el sistema inmunológico, e influye en gran medida en el estado de ánimo de la persona. Es por esta razón que si se posee niveles elevados de la hormona de cortisol, la persona puede experimentar problemas como insomnio, alteraciones en el funcionamiento del organismo, defensas bajas, entre muchas otras cosas.
Por esta razón, resulta sumamente importante saber cómo controlar y reducir la tensión que es provocada por situaciones cotidianas, que dan lugar a cambios físicos y emocionales.
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7 Asombrosos consejos para reducir el estrés
1. Medita:
La meditación es una herramienta clave para que puedas reducir el estrés rápidamente. De hecho, un estudio hecho en Tailandia, reveló que las personas que practican constantemente meditación budista, tenían más bajos los niveles de cortisol, al igual que la presión arterial. De igual manera, lograron que cierta cantidad de personas meditaran a diario, durante un periodo de 4 meses, y notaron que estas personas, disminuyeron los niveles de cortisol aproximadamente en un 20%.
2. Duerme lo suficiente:
El hecho de que no tengas el tiempo, o simplemente no puedas dormir las 8 horas diarias recomendadas, puede implicar que aumente hasta un 50% los niveles de hormona de cortisol presentes en tu organismo. En un estudio realizado en el Instituto de Medicina Aeroespacial de Alemania, se comprobó que aquellos pilotos que dormían 6 horas o menos, durante las 7 noches de la semana, tenían más altos los niveles de cortisol, y estos se mantuvieron así durante dos días mas. Si por algún motivo, se te hace muy difícil dormir las 8 horas reglamentarias para controlar correctamente el estrés, puedes optar también por tomar una siesta, pues esto contribuirá a reducir los niveles de cortisol.
3. Respira:
Así tal cual, algo tan sencillo como respirar profundamente puede ayudarte de forma significativa a reducir el estrés. Cuando te encuentres en una situación difícil, o ante algo que te cause tensión y por lo tanto estrés, simplemente debes tomar unos cuantos minutos para ti, tomando aire profundamente, y exhalando con suavidad. Repite esto las veces que sean necesarias, y podrás notar como poco a poco te irás calmando. De esta forma estarás contribuyendo a reducir el estrés y por lo tanto estarás protegiendo indirectamente tu salud.
4. Toma un té:
Una excelente opción para ayudar a reducir el estrés es tomar una taza de té. Pero no cualquier té, lo más recomendable es que sea o manzanilla o té negro. La manzanilla es conocida a nivel mundial por la gran cantidad de beneficios que proporciona al organismo, y uno de ellos es que tiene propiedades que ayudan a relajar a la persona. El té negro por su parte, contiene polifenoles y flavonoides que causan un efecto calmante inmediato. Un estudio realizado en el University College de Londres, reveló que las personas que tomaban una taza de té negro después de pasar por una situación estresante, reducían hasta un 47% sus niveles de cortisol.
5. Utiliza masajes:
Una investigación realizada en Miami, comprobó que los niveles de cortisol se pueden disminuir considerablemente mediante la aplicación de masajes, puesto que estos masajes te relajan y te permiten liberar serotonina y dopamina, también llamadas las hormonas de la felicidad, que igualmente son liberadas cuando haces algo divertido, o socializas con amigos.
Utiliza aceites esenciales como lo son el aceite de canela y el aceite de almendras. Caliéntalos un poco hasta que se encuentren tibios, y da ligeros masajes detrás del cuello o pídele a alguien que te realice masajes en la espalda o en zonas donde sientas tensión.
6. Haz ejercicio:
El ejercicio es un des estresante sumamente conocido, ya que cuando practicas ejercicio, liberas endorfinas que te hacen sentir bien y por lo tanto mejoran notablemente tu estado de ánimo. Estas endorfinas también se liberan durante el sexo. Para ello elige la forma de ejercicio que más te guste o que mas disfrutes, puede ser correr, caminar, andar bicicleta, realizar pesas, practicar algún deporte, etc. Trata de realizar este ejercicio que elijas al menos 3 veces por semana, y que dure como mínimo unos 20 minutos cada sesión.
7. Recompénsate tu misma:
Si has tenido un día difícil, en donde has experimentado mucha tensión, toma un tiempo para ti, para hacer algo que te proporcione placer y tranquilidad. Puede ser un baño relajante, presenciar el atardecer, leer un libro, ir al cine o al teatro, etc. Así lograrás relajar tu mente y tu cuerpo, y podrás notar que posteriormente sentirás mucha mas energía para afrontar las situaciones.
Así mismo es importante que tu hogar, específicamente tu habitación, sea un ambiente que te proporcione tranquilidad. Es decir, si vienes de pasar por una situación de mucha tensión, llegas a tu habitación y está hecho un desastre, la situación sólo va a empeorar. Por ello te recomendamos que mantengas limpia y organizada tu habitación, para que la energía fluya correctamente.
Aplica estos consejos para reducir el estrés, y notarás cómo poco a poco tu vida irá cambiando a mejor, pues aprenderás a controlar las emociones negativas que te produce el estrés, y protegerás tu cuerpo de enfermedades que pueden ser causadas por esto.
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