1-NO TE OLVIDES EL ACONDICIONADOR: Este producto permite disciplinar mejor el cabello a la hora de peinarlo pero también tiene otras funciones: -Cabello más brillante: Al aplanar las cutículas, permite que la luz se refleje sobre el cabello. -Repara y protege: Muchos de ellos, sobre todo los destinados a cabellos teñidos, incorporan proteínas restauradoras o activos protectores del color.
2-ACLARA MUY BIEN EL PELO: Parece algo muy obvio, pero merece la pena hacer hincapié. -Usa agua destilada: Sobre todo si vives en una zona con aguas duras, porque quedará más brillante y suave. -Para evitar el apelmazado: Si eliminas bien los restos de champú, no quedarán mezclados con el acondicionador y el pelo no se verá aplastado.
3-NO FROTES: A la hora de secarlo, no lo frotes bruscamente con la toalla, porque las cutículas se levantan y rompen. El cabello mojado es cuando se muestra más frágil. Es mejor realizar suaves presiones o envolverlo a modo de turbante hasta que la toalla haya absorbido la humedad.