1-HIDRATACIÓN: hasta las piernas más bonitas pueden perder todo su atractivo si están resecas o ásperas al tacto. Hidratarlas en profundidad es por lo tanto, la primera medida que debemos tomar. Tras la higiene diaria, conviene aplicar una hidratante corporal y aprovechar el momento para darnos un masaje ascendente, un gesto ideal si se te hinchan los tobillos, sufres de piernas pesadas o tienes varices. Si tienes poco tiempo o te da pereza, prueba a utilizar un gel hidratante en lugar de una crema. Gracias a su textura más fluida y ligera, el gel corporal se desliza y absorbe con mayor rapidez.
1-HIDRATACIÓN: hasta las piernas más bonitas pueden perder todo su atractivo si están resecas o ásperas al tacto. Hidratarlas en profundidad es por lo tanto, la primera medida que debemos tomar. Tras la higiene diaria, conviene aplicar una hidratante corporal y aprovechar el momento para darnos un masaje ascendente, un gesto ideal si se te hinchan los tobillos, sufres de piernas pesadas o tienes varices. Si tienes poco tiempo o te da pereza, prueba a utilizar un gel hidratante en lugar de una crema. Gracias a su textura más fluida y ligera, el gel corporal se desliza y absorbe con mayor rapidez.