Contenido, contenido, contenido.

Publicado el 30 abril 2015 por Alexserramar @Alexserramar
campañas marketing contenidos
Puede que los rumores que se han oído estos días sobre la posibilidad de que Facebook cierre las cuentas en las que se cometan muchas faltas de ortografía no acaben por hacerse realidad, pero lo que sí es cierto es que un buen contenido ayuda en todas las plataformas digitales de marketing que tenemos a nuestro alcance: blogging, redes sociales, publicidad, etc.Facebook cierre las cuentas en las que se cometan muchas faltas de ortografía
Sí, señores: Google penaliza por las faltas y las erratas. Podemos gastarnos un dineral en estrategias de SEO para posicionar bien nuestra empresa y productos, pero un error gramatical puede tirar al traste parte de ese esfuerzo por convencer al buscador todopoderoso de que nosotros debemos estar arriba.
Es necesario crear contenido original (nada de copiar/pegar) y de calidad, que sea interesante, que ofrezca puntos de vista diferentes y tenga algo que ofrecer. Y con contenido, buen contenido, no nos referimos únicamente al texto escrito sino también a la parte visual.
Como si fuera un plato de comida, los contenidos web entran por los ojos. Un buen diseño nos puede salvar la vida; podemos tener un texto brillante, que explique a la perfección todas las maravillas que somos capaces de hacer, pero una imagen anticuada, de mala calidad o que se vea demasiado genérica, hará que nadie lea lo que tenemos que decir.
El ejemplo de Twitter es muy claro: utilizar imágenes y vídeos en nuestros tweets aumenta 10 veces su eficacia. No es necesario que sean fotografías de premio Pulitzer ni grandes producciones cinematográficas, simplemente que tengan la calidad suficiente como para que atraigan a nuestros seguidores y les inviten a querer leer.
No vale excusarse en la falta de medios. Siempre, lo más importante es la idea, simplemente hay que intentar llevarla a cabo de la mejor manera posible.
Cada vez son más las grandes empresas que se están dando cuenta de que las fotocopias no sirven de nada: mala calidad, poca originalidad, caracteres borrosos… nadie quiere tener una fotocopia. Por eso, desde el marketing, se está apostando por la creación de contenidos cada vez más creativos y personales. Básicamente consiste en preguntarse: ¿a mí qué me gustaría leer y cómo me gustaría que me “sirviesen” ese contenido?
Vamos a poner dos ejemplos de grandes marcas, de sectores muy diferentes, que tienen en común el hecho de haber decidido crear sus propios contenidos a todos los niveles. Aunque cuenten con la ayuda de empresas externas, sus estrategias, su imagen y su público están muy claros. Conocen muy bien a aquellos a los que se dirigen y su objetivo es simplemente hacerles saber que su marca y su producto están hechos para ellos. Van más allá del típico vídeo promocional e imprimen su sello en todo lo que hacen.
La compañía de poker online PokerStars, que tiene su centro de operaciones en el Reino Unido, está lanzando una serie de campañas que poco tienen que ver con los anuncios clásicos del sector del juego. Nada de intentar vender el rollo James Bond y la chica guapa que le espera en el Ferrari, se ofrecen contenidos que interesan a su público más allá del póquer y con los que pueden interactuar. En Brasil hicieron creer que el ex futbolista Ronaldo podría volver a jugar a fútbol. Ellos no dijeron nada, dejaron que fueran las redes sociales las que creasen el “bulo” y se llegó al punto que algunos medios de comunicación publicasen la noticia del regreso de O Fenómeno. Con este anuncio se descubría “el pastel”.
Su última campaña ha sido crear un juego interactivo con el que puedes medir tu coeficiente intelectual para el póquer, es decir, si tienes las habilidades que necesitan estos jugadores o no.

El otro ejemplo es el Primavera Sound. El festival que se celebra en Barcelona no sólo se ha convertido en el más internacional del país sino que se ha convertido en una propia marca que incluso han exportado fuera de España. Se ha creado una imagen Primavera Sound, se ha conseguido fidelizar a miles de personas y se ofrece un producto que se distingue por haber cuidado cada detalle para diferenciarse de los demás.  
Los anuncios del Primavera no se limitan a dar el cartel y enseñar imágenes al atardecer de jóvenes que disfrutan de la música en vivo, sino que se crean pequeñas historias con las que la gente puede identificarse. Como en el caso de PokerStars, incluso se atreven a jugar con los clichés que pesan sobre ellos y darles la vuelta para utilizarlos a su favor.
Este año el festival cumple 15 años y lo celebran poniéndose de lado de una generación que ha crecido con el Primavera Sound.

En una campaña anterior, se crearon varios vídeos para los “adictos” al Primavera Sound. Es una forma de marcar territorio. Ingenio y buen hacer.