Empezamos la semana con una canción que nos cuenta la triste historia de un niño llamado Luka que está siendo víctima de maltrato en su propio hogar.
La música de la canción dulce, bonita y serena esconde una terrible y devastadora historia, conviertiéndose en una metáfora de cómo las víctimas de maltrato tratan de negar el abuso que sufren e incluso llegan a culparse a ellos mismos, como Luka que trata de justificar el maltrato recibido cuando dice “es porque soy torpe“, “es porque estoy loco“…
A continuación podréis escuchar tanto la canción original en inglés como la versión en español:
La canción es por supuesto una crítica al maltrato infantil, pero sobretodo es una crítica a la indiferencia de la sociedad ante dicho maltrato, una llamada de atención al vecino que escucha los gritos, los lloros, los golpes… y no hace nada.
No podemos ser indiferentes, ante cualquier sospecha de maltrato infantil hay que acudir a profesionales capacitados para investigar y tratar dichos casos: educadores, médicos, servicios sociales, policías, juzgado de menores…
Porque la indiferencia nos hace cómplices y responsables del maltrato infantil, grita con nosotros, ¡NO AL MALTRATO INFANTIL!