En el año 2001, tuve la ocasión de trabajar en Centroamérica (Guatemala, Nicaragua y El Salvador) como responsable TI de las delegaciones de CIR (Center for International Rehabilitation) , y conocer su proyecto antiminas personales directamente de su fundador William Kennedy Smith (sí, uno de los familiares descendientes de JFK) .
En las delegaciones palpé la realidad de aquellos médicos que aprendieron a serlo en la guerra, amputando piernas y colocando prótesis que consistían en poco más que un palo de madera. Muchos de ellos lo sufrieron en sus propias carnes antes de ‘ser médicos’ . CIR les otorgaba la posibilidad de obtener una títulación a esos conocimientos y experiencia mediante un curso online a su sede de Chicago, de los cuales yo era responsable de montar la infraestructura de comunicaciones (en aquel entonces módem mediante línea telefónica) y compartir 2 PCs mediante cable cruzado … Fue todo un reto explicar internet a aquellos que nunca habían tocado un PC anteriormente en su vida.
Por todos ellos me sumé a la Campaña contra las minas antipersonales