Comúnmente cuando se habla de sentimientos en Bolsa nos referimos a la conocida como psicología del trading, donde habrá que hacer especial incapié en el sentimiento de euforia. Los buenos resultados de las operativas y estrategias que se llevan a cabo, deben ser tomadas con la más absoluta prudencia y humildad.
Podría asemejarse con la sensación de inmortalidad propia de los jóvenes... como somos tan buenos nunca nos equivocaremos, pase lo que pase. La realidad es otra bien distinta, y en un mercado tan complicado y cambiante como el de estos tiempos que corren, nada debe hacernos perder la cabeza; ni el éxito, ni el fracaso.
En general, hay que intentar aprender algo nuevo de cada operativa y estrategia, de cada movimiento que se realice. Ya sabéis que: "comprar el pescado en la pescadería está bien, pero aprender a pescar es aún mejor".