El Camino de Santiago por tierras castellano-leonesas nos ofrece muchísimos rincones y lugares de interés. Uno de ellos son las ruinas del convento de San Antón, cuyos arcos se elevan sobre la carretera y parecen el esqueleto de una ballena. Esta construcción la encontramos en la etapa que realizamos de Rabé de las Calzadas a Castrojeriz.
El convento de San Antón es de estilo gótico. Fue fundado en 1146 por Fernando VII y, en él, los monjes trataban a los enfermos de una gangrena infecciosa conocida vulgarmente como "fuego de San Antón".