La verdad es que ya forma parte de casi todas mis amigas y hay pocas mujeres que no la conocen, pero creo que nunca sobra hablar de ella para seguir difundiendo la palabra. Parece que me pagan por venderla, y aunque me lo han ofrecido, no es así, lo prometo.
Aunque ya hayáis escuchado hablar o habéis leído sobre ella, creo que hay que hacerle justicia empezando a explicar qué es.
Es una herramienta para el ciclo menstrual como el tampón o la compresa.
¿Cómo es?
Es un recipiente muy parecido a una copa (de ahí su nombre) hecha por silicona médica y un pitorro.
¿Cómo funciona?
Se introduce en la vagina y se cambia cada 12 horas aproximadamente. Se usa la misma copa cada vez.
Esto suele dar mucho asquito y es lo que principalmente echa para atrás. Pero no debería ser un problema, ya que se pone a hervir cada principio y final de ciclo y sacarla y volverla a poner no tiene riesgo. Lo siguiente de lo que la gente que no lo ha probado se queja es que ves tu sangre. Si esto es un inconveniente, mejor no sigas leyendo.
Curiosamente lo que no sabe la gente es que la sangre huele cuando tiene contacto con el oxígeno. Al no haber llegado a salir y no tener contacto, esta sangre no huele.
Ventajas de la copa Menstrual:
No tiene productos químicos que dañan la flora vaginal. No hay riesgo del síndrome del shock tóxico por el que mueres sin darte cuenta. Dura unos 10 años. No genera residuos. Puedes bañarte con ella sin problemas. La amortizas en menos de cuatro meses.
Pero lo mejor es lo increíblemente cómoda que es. La gente no se lo cree, pero te olvidas durante un tiempo que eres mujer. No quita los dolores, pero sí la molestia de cambiarte.
Yo la he llegado a tener puesta sin cambiarla durante todo lo que me dura la regla. El último día manchaba, es verdad, pero no era peligroso.
Inconvenientes:
Sólo la primera vez que la pones. Aunque en mi caso fue al quitarla. Pero sólo es la “insapiencia” de la primera vez. Al siguiente ciclo ya le has pillado el truco y te ríes de esa primera vez.
Por lo demás, no conocidas.
Indicaciones:
Cada mujer, igual que su regla, es única. Las hay que no usan el pitorro para nada y se lo cortan, las hay que sin pitorro son incapaces. Luego está el tema de ponerla, hay varias maneras de hacerlo. También de cuánto tiempo se pone, depende del flujo. Eso cada mujer tiene que descubrir la suya porque hay tantas maneras de llevarla como colores del pelo naturales.
Mi experiencia:
Estamos hablando de una mujer a la que le encanta probar todo aquello desconocido y nuevo. Pero que encima tenía la desgracia de ser alérgica a las compresas (incluso a las hipoalergénicas) y que no conseguía empapar bien los tampones, así que los tenía más tiempo del recomendado con los riesgos que eso implica o le dolía bastante cuando llegaba la hora de quitarlo.
Cuando descubrí su existencia me lancé a todas las farmacias del pueblo y los herbolarios dado que al día siguiente comenzaba un ciclo nuevo. Todas me miraban con cara de asquito. (Sé que el herbolario ahora la vende).
Como no la encontré, tuve que comprar por Internet y esperar al siguiente ciclo.
Me pillé una Fleurcup pequeña. La primera vez que me la puse estaba encantada, mi problema fue al sacarla. ¡Ya me estaba planteando ir al hospital! Fleurcup es una marca que sólo tiene dos tamaños y la pequeña que tenían me quedaba bastante grande. Acabé acostumbrándome, pero se me hacía raro la fuerza que tenía que hacer para sacarla.
Descubrí una oferta de la Copa Meluna y decidí probarla. Tienen diferentes texturas y más tamaños. Primero probé la Clasic Tamaño M, y me pasaba lo mismo que con la Fleurcup. Así que me enviaron la Soft Tamaño S, ¡¡y fenomenal!! Me gustó mucho, pero cuando ya tienes costumbre de usarla, es mejor una con más consistencia. Creo que la recomiendo como primera copa, para quien no está muy segura a la hora de quitarla. Yo no aguanté más de un año con ella y me pasé a la Clasic Tamaño S. Ahora estoy realmente encantada.
No me extiendo mucho más, aunque podría, para no aburrir a quien ya la tiene.