A meses de aquella experiencia, Copie conforme (éste es el título original) queda en nuestra memoria como el trabajo menos representativo de la filmografía del realizador iraní, o como una prueba contundente de la influencia que la globalización también tiene en el cine de autor. En este sentido, es probable que algunos seguidores de Kiarostami sientan una pizca de desilusión ante un largometraje ambientado en la Toscana y hablado en italiano, francés e inglés.
Dicho esto, es poco probable que el reencuentro desencante. Aún fuera de su país, don Abbas se mantiene fiel a su manera de contar historias íntimas con profundidad, sensibilidad y un exquisito sentido de la estética.
Calidad técnica, guión sólido, actuaciones impecables son algunas de las expresiones utilizadas en la reseña aquí publicada. Tal vez los cinéfilos quieran (re)leerla antes de acudir a una cita tantas veces promocionada.