Y con esto ya se dan por terminadas las fiestas.....
Me gusta la Navidad y siempre he disfrutado con estos días, sobre todo cuando mis niñas eran pequeñitas, pero reconozco que al final acabas hasta arriba de comer y de preparar comidas....y llega un momento en que el cuerpo dice: ¡¡ stop !!
De todas formas os dejo esta receta de cordero asado, que no tiene desperdicio.
Fácil y un éxito seguro.
Los grandes cocineros recomiendan hacer el asado solo con sal, un vaso de agua y un poco de manteca de cerdo, pero en casa siempre hemos añadido el vaso de vino blanco y queda muy bueno.
Ingredientes:
- 2 paletillas de lechal
- aceite de oliva
- sal
- 250 ml. de vino blanco
- 250 ml. de agua
Preparación:
Calentamos el horno a 180º.
Sazonamos las paletillas y las ponemos en una fuente de barro.
Rociamos con un chorrito de aceite y le añadimos el vino blanco y el agua.
Metemos al horno durante unas dos horas ( las mías se hicieron en algo más de hora y media), dándole la vuelta de vez en cuando para que se vayan dorando por los dos lados.
Con ayuda de una cuchara vamos regando las paletillas con el jugo que se va creando en la fuente para que no se nos seque.