Las patatas se pueden hacer de formas muy diversas, nos ayudan a completar platos, en ocasiones pueden ser hasta un plato completo en sí mismo, están presentes en gran parte de los platos que cocinamos.
En esta ocasión os traigo una forma diferente de presentarlas para acompañar un plato de carne, queda muy vistosa, además no presenta complicación ninguna.
Yo las he preparado con manteca de cerdo porque les da un toque de suavidad a las patatas, pero las podéis preparar con mantequilla o con aceite de oliva virgen extra.
Es importante que pongáis papel de hornear en la base de la bandeja del horno para evitar que se peguen las patatas al fondo, además de esta forma resulta más sencilla la limpieza.
VAMOS A NECESITAR:
800 gr de patatas de buena calidad70 gr de manteca de cerdo (o mantequilla)Sal, pimienta.
Precalienta el horno a 210º con calor por arriba y por abajo.
Pela las patatas y córtalas en rodajas finas.
Pon las patatas en un cuenco y añade sal.
Cubre el fondo de la bandeja con papel de horno
Unta con un poquito de manteca el papel.
Forma un círculo con las patatas de forma que se superponga una encima de la siguiente, añade un poco de pimienta y trocitos de manteca, forma otro circulo encima del primero, repite la operación hasta acabar con todas las patatas, pon pimienta y manteca en cada capa. Debes tener un mínimo de 4 capas.
Tapa la bandeja con papel de aluminio y lleva al horno durante una hora, pasado este tiempo pincha las patatas para ver si están tiernas, si ya están tiernas déjalas destapas al menos 10 minutos para que se doren. Para este paso puedes poner el gratinador.
Con mucho cuidado pasa la corona de patatas al plato de servir. Yo he pasado las patatas con el papel de horno y luego en el plato ya he quitado el papel.