Desde que vi esta delicia en Directo al paladar, andaba buscando el momento de recrearla y, de paso, recrearme.
Ya preparé los riquísimos rollitos de canela o cinnamon rolls, que me recuerdan muchísimo a esta receta.
Se trata de una especialidad navideña de los países nórdicos europeos cuyo nombre original "kringla" significa anillo o círculo. Allí la toman en el desayuno y con rellenos variados de frutos secos. Por lo visto está mejor de un día para otro, pero no sé si sobrará para mañana...
Aunque su preparación parece muy compleja, es como una clase de trabajos manuales. Yo me pongo música en la cocina y acometo con paciencia y amor la labor. Se puede!!
Para unas 8 raciones:
- 120 mL de leche templada
- 30 g de azúcar glas
- 15 g de levadura fresca de panadero (las pastillas prensadas)
- 30 g de mantequilla a temperatura ambiente
- ralladura de limón
- 300 g de harina de fuerza
- 1 yema de huevo (guardar la clara para el glaseado)
- una pizca de sal
Para el relleno de canela:
- 60 g de mantequilla a temperatura ambiente
- 70 g de azúcar
- 2 cucharadas soperas de canela molida
- 1 cucharadita de moka de jengibre molido
- 50 g de frutos secos (yo puse nueces, pero pueden ser avellanas, almendras...)
- pasas (opcional)
Para el glaseado:
- 1 clara de huevo (los restos del huevo cuya yema utilizamos en la masa)
- 50 g de azúcar glas
- zumo de limón
En el vaso de leche templada desleímos la levadura fresca, desmenuzándola con los dedos y removiendo hasta que se disuelva por completo.
En un bol grande agregamos el azúcar, la mantequilla blanda, la ralladura de limón y la leche con la levadura disuelta, mezclando bien con unas varillas manuales o eléctricas los ingredientes. Se incorpora la yema de huevo batida y se continúa removiendo.
Se añade la harina y la pizca de sal y se bate bien.
Se saca a una superficie enharinada y se bolea unos instantes (unos 2 minutos), amasando y formando una bola de masa elástica.
Se engrasa un bol grande y se deja la bola de masa, tapada con un papel de film o con un paño de algodón limpio, en un lugar fuera de corrientes y más bien cálido, hasta que doble su volumen. Yo la tuve unos 70 minutos.
Mientras va levando la masa se prepara el relleno de canela. Se pone en un bol la mantequilla templada, la canela, el jengibre y el azúcar.
Se bate bien con unas varillas hasta formar una masa densa, como en la imagen, y se reserva.
Se precalienta el horno con calor arriba y abajo a 180ºC. se introducen los frutos secos en una bolsa de congelación, se cierra y se pasa un rodillo o mazo por encima, machacándolos en trozos irregulares.
Una vez que la masa ha duplicado su volumen se saca a la encimera y se trabaja un poco. Se estira con un rodillo hasta dejar un rectángulo de 50x40 cm, aproximadamente.
Se cubre el rectángulo de masa con la pasta de canela.
Se comienza a enrollar, comenzando por un extremo largo y presionando levemente a la vez que formamos el rollo.
Una vez formado el rollo se presiona con la mano, como si fuéramos a agarrar un rodillo, para dejarlo con el mismo grosor por todo el cilindro.
Se toma un cuchillo bien afilado y se hace una incisión en el centro del rollo, hasta el final, como en la imagen:
Se hace una trenza con los dos cabos, cuidando que las estrías queden hacia afuera y se forma un anillo, cerrando los extremos:
Se pinta con huevo batido y se introduce en la parte baja del horno, donde se hornea durante 20-25 minutos.
Se prepara la glasa, batiendo a punto de nieve la clara con un tenedor, junto con unas gotas de zumo de limón. Se agrega una primera cucharada de azúcar glas y se sigue batiendo, y luego una segunda y un poco más de zumo. Se comprueba si está muy líquida (en cuyo caso se agrega más azúcar glas) o muy espesa (entonces se añade más limón).
Se vierte en forma de hilos encima de la corona recién horneada y se deja enfriar. Se disfruta con un café.
Se puede preparar con otros rellenos, yo estoy deseando hacerla de Nuttella para mis hijos...