Coronando cimas...

Por Triatlonenfamilia @triatlonfamilia
Y siguiendo con mi meta de fortalecer, esta semana hemos vuelto a la montaña. Aunque esta vez no hemos ido solos, Koke y Rosa junto a sus sobrinos Isamar y Quim se unieron a mi cruzada.
Ellos han empezado a correr y les tiene también enganchados, pero no les importó bajar el ritmo y cambiar su tirada larga de domingo por caminar a nuestro lado.
En agradecimiento nosotros buscamos una ruta que a ellos también les gustara o les pudiese hacer ilusión y decidimos llevarlos a subir el pico del Sui (1318m). Ellos corren por montaña pero aún no habían coronado ningún pico, así que ambos, salíamos favorecidos.
Os lo he dicho muchas veces pero nosotros al Sui tiene le tenemos un especial cariño, es mas, en agosto fue donde celebramos nuestro último aniversario de bodas. Está claro que hay muchos y mas bonitos Puigmal, Pedraforca, Matagalls... los que queráis, pero si hay que empezar por uno me quedo con el Sui, que está en mi casa,  tenemos tiempo de sobra para irlos coleccioando todos... ;)
Pero hoy tocaba el Sui, la primera parte del recorrido es evidentemente subida, hasta que no llegas a la cima y empiezas a crestear de una montaña a otra, no hay otra que subir.
Se puede ir por pista pero intentamos tocarla lo menos posible, hicimos el 90% del recorrido por sendero, yo lo prefiero, es mas entretenido, variado, y la ruta se hace mas amena.
Íbamos subiendo y yo lo único que les decía era que miraran el paisaje porque era una pasada, íbamos dejando el pueblo abajo a pasos agigantados.
 Fuimos a un ritmo cómodo para todos, con alguna parada para reponer fuerzas y la verdad que tuvimos una suerte tremenda, ya que pese a dar lluvia y mal tiempo tuvimos un día perfecto y al llegar a la cima teníamos unas vistas increíbles desde Montserrat, pasando por las Cingles de Bertí, Puiggracios, Turó de l´Home, Matagalls, el Pirineo ya con algo de nieve hasta la playa, una pasada.
Después de hacernos las respectivas fotos para recordar hazaña y cumplir con la tradición de agregar una piedra, al montón que ya hay pidiendo un deseo, iniciamos la bajada.
Podíamos habernos comido un bocata a mitad del camino pero queríamos enseñarle a Koke y a Rosa un restaurante que se encuentra a mitad de camino, en pleno corazón del Montseny y al que solo se puede acceder caminando, La Casa del Bosc, los dueños son amigos y han vivido allí toda la vida, sólo os diré que parte de la montaña es de su familia y se conocen casi cada árbol y cada piedra de la zona, es un lujazo pasear con ellos por esta zona porque te explican historias y te enseñan cosas que habiendo pasado tu por allí 50 veces, ni te habías fijado.
Y se come de vicio, todo cocina típica catalana... eso sí, luego había que seguir bajando pero os aseguro que ya nos iba bien.
El problema fue cuando se hizo de noche y es que desde el cambio de hora anochece prontísimo, pero todo y que había algunos tramos mas técnicos y a oscuras se hacían mas difíciles, éstos  se convirtieron en los mas divertidos y es que siempre alguno se le iba algún pie, pero éramos un equipo y  nos ayudábamos entre todos, pero es que los críos siempre soltaban alguna gracia y con las risas perdías la concentración y así no se puede...jajaja
Pero Iván que últimamente tiene una orientación admirable nos llevo sanos y salvo a casa. Eso si, ya no le creía nadie porque cuando alguno preguntaba cuanto quedaba Iván siempre contestaba ..que ya estábamos cerca.. pero ese cerca podría ser tranquilamente un par de horas...jajaja
Pero la verdad que pasamos un día estupendo, los mayores por supuesto pero los críos que es lo que a mi me preocupa también se divirtieron. Me sorprendió el peque Gerard,  haciendo planes ya de donde quería ir en la próxima excursión. Y os aseguro que así da gusto hacer las cosas.
Porque como decía Koke, momentos así es de los que quiero llenar yo mi vida porque dinero, trabajo todo eso esta muy bien, pero las vivencias es con lo que te quedas y es lo que te acompañará siempre, y si podemos vivirlas los cuatro juntos pues ya es la bomba.
Agradecerles a Koke, Rosa, Quim y Isamar su compañía y no se porque me da a mi, que no va a ser la última vez que nos encontremos por estos lares...