Correr descalzo – Incursión veraniega al descalcismo.

Por Fermín Fermin Fernandez @ferminffaviles

Hace 2 años que empecé en mi visita veraniega a tierras ferrolanas a probar a correr con sandalias, este año me ha apetecido experimentar con el descalcismo.
Ferrol, agosto de 2016

En las vacaciones apetece relajarse, pero también correr, o correr relajado. Todos los veranos salgo a descubrir nuevas rutas por estas tierras, relajado, observando el paisaje, descubriendo rincones. Este año, aunque no lo tenía previamente previsto, además de esto, me apeteció experimentar con el correr descalzo. Me encanta correr en sandalias y creo es la manera en la que siempre correré pero me apetecía probar las sensaciones de correr descalzo, comprobar si era capaz de hacerlo y de paso fortalecer los pies.
Veranos anteriores ya había corrido descalzo algunos kilómetros por la arena de la playa, incluso por asfalto una vez hice par de km., pero no había pasado de ahí. Este año, la idea era correr un rato descalzo en cada salida, aumentando las distancias progresivamente según me fuera encontrando.
Aclaro que esto que relato no explica ni es ejemplo de un proceso de transición sino una incursión, una prueba, y que tras ella, para nada me considero preparado para correr descalzo. Únicamente quería probar si era viable, si podía, para después decidir si iniciar este camino de readaptación del pie.

1ª salida: 24 julio – 11 km.: 7 km. EnixSandals + 4 km. descalzo


Primer día de running vacacional en tierras Gallegas por mi camino preferido, desde la playa de Cariño hasta la Cetarea de San Felipe, siguiendo la ría de Ferrol. 11 km. ida y vuelta.

Mapa y altimetría de la ruta 1


Playa de Cariño (Ferrol)


  • 7 km. EnixSandals: Ida por el espectacular camino de tierra paralelo a la ría hasta el Castillo de San Felipe, cruzar el pueblo hasta la Cetarea (lugar donde se cría/come marisco), subir la joia cuesta con sus 5 revueltas hasta la carretera, bajada de nuevo al pueblo, cruce y subida hasta el inicio del camino, solo que ahora voy a volver por la carretera.

San Felipe


  • 4 km. Descalzo: Me siento en un banco, engancho las sandalias al cinturón y a correr descalzo. Carretera en subida, ritmo muy lento (sobre 7’/k), el asfalto es nuevo, suave, por lo que voy bastante cómodo. Esta carretera es bastante solitaria. A estas horas tempranas más, salvo a un pastor que está por allí con sus ovejas, a nadie sorprende mi osadía. Al llegar a la Ermita de San Cristobal después de 2 km. el asfalto cambia, ahora es más más desgastado y rugoso. Por aquí las plantas de los pies se van haciendo más sensibles y no es tan cómodo correr, pero llego a destino, incómodo, pero sin problema.

Pies tras 4 km descalzo



2ª salida: 26 julio – 12 km.: 8,5 km. EnixSandals + 3,5 km. descalzo


Segundo día, cambiamos de ruta, vamos a costear por el monte hasta Punta Penencia.

  • 8,5 km. EnixSandals: Me encanta esta ruta, salvo el arranque que es una cuesta de un 1 km. con 100 m. de desnivel+, “pa” calentar. Subo despacito, sigo por otra carretera hasta el lago de Doniños, cojo un camino hasta la playa y desde aquí una senda panorámica que sigue la costa desde Punta Penencia dirección Cabo Prioriño. Esta senda este año está muy cerrada de tojo (matorral autóctono que pincha bastante) por lo que entre eso y las pendientes es complicado correr en algún tramo, pero las vistas atlánticas son imponente. Llego hasta unas defensas militares abandonadas y desde aquí por un camino muy pedregoso hasta la carretera de vuelta.

algunas fotillos de la ruta


  • 3,5 km. Descalzo: Tocando asfalto me cuelgo las sandalias en el cinturón y a correr descalzo. Este asfalto está bastante bien, por lo que corro muy cómodo, no noto ningún malestar en los pies. El ritmo es suave, sobre 7’/k. salvo el último kilómetro de bajada donde, curioso, tengo que ir más despacio. Me sorprende el sentir los cambios de temperatura en el asfalto, de repente notar el asfalto frío, supongo que por alguna corriente de agua que pasar por debajo. Llego a destino con la sensación de que me ha sabido a poco el tramo descalzo, pero mejor no abusar.


Pies tras la segunda ruta



3ª salida: 28 julio – 10 km.: 2 km EnixSandals + 6 descalzo + 2 km EnixSandals


Ninguna molestia ni síntoma negativo en los pies, salvo un negror del asfalto en los pies difícil de sacar. Repito la ruta del primer día hacia San Felipe, ahorrándome la subida de las 5 revueltas pero aumentando el tramo descalcista.
  • 2 km. EnixSandals: Salgo con las sandalias hasta la Ermita de San Cristobal, a 2 km., evitándome así correr descalzo el tramo malo de asfalto.

Asfalto desgastado


  • 6 km. Descalzo: En la ermita me quito las sandalias y continúo. El asfalto es bueno, la carretera desierta, no me cruzaría más de 2 coches en todo el camino. Ritmo suave, aunque algo menos, dependiendo del trazado, sobre 6:40 – 6:50. Llego al Castillo de San Felipe, cruzo el pueblo, el asfalto por aquí más sucio, alguna chinita que me provoca algún movimiento “Chiquito de la Calzada”, llego a la cetarea y doy la vuelta ahorrándome la subida del primer día. En el último kilómetro noto ya algo sensibles las yemas de algunos dedos, como si me fuera a salir una ampolla, igual me estoy pasando.

Asfalto nuevo


  • 2 km. EnixSandals: En la ermita de nuevo me calzo mis Enix050 y echo a correr. Joer que sensación, ¡¡Parece que llevo unas “AirMax”!!, floto sobre el asfalto, apetece hacer estos dos últimos kilómetros a tope.

Pies tras la tercera salida


Al día siguiente tenía los pies y plantas sin ninguna molestia que destacar, pero notaba una ligera sensibilidad en las yemas de los dedos y metatarsos, por lo que decidí descansar un par de días.


4ª salida: 31 julio – 17 km.: 8 km. EnixSandals + 9 km. descalzo


Repito la ruta costera de la segunda salida pero con alguna variación para hacerla más larga.

Mapa y altimetría de la Ruta 2


  • 8 km. EnixSandals: Bueno, pues es lo que hay, el kilómetro de cuesta que cuesta para empezar!!Empiezo a subir y oh! Sorpresa, a unos 200 m. por delante de mí veo a un zorro que me observa y después escapa. Es lo que tiene correr en silencio a horas tempranas en la naturaleza. Subo más suave y acabo mejor que la vez anterior, lo hago así porque hoy voy a seguir subiendo otro kilómetro más dirección Cabo Prioriño para hacer el circuito en dirección contraria. Dejo la carretera, cojo camino de piedras, senda con vistas espectaculares y bajada hasta la playa de Doniños.

Playa de Doniños


  • 9 km. Descalzo: Empiezo la sesión de descalcismo por la playa, 2 km. disfrutando de correr por la suave y fresca arena, chapoteando el agua en ocasiones. Llego a la otra punta y vuelvo por una pasarela de madera alrededor de 1 km. Me cruzo con un grupo de corredores que me miran con cara de, entre incredibilidad y desaprobación. Entro en el asfalto, ahora menos el último km. final casi todo es subida, el asfalto no es nuevo pero no está mal, salvo cruzar una aldea que hay bastante grava. No notó ningún síntoma negativo en los pies. Un poco de sensibilidad en la yema de algún dedo pequeño en el último kilómetro, se nota que los pies aún no están adaptados a tantos kilómetros.

El premio de hoy no podía ser otro que meter los pies en el agua frío y salado y relajarse un rato paseando sobre la arena suave y con el agua fría y cristalina hasta las rodillas.

La relajante mar salada


5ª salida: 2 de agosto – 10 km.: 10 km. descalzo


Bueno, pues hora de la verdad, como no había encontrado ningún dificultad en las anteriores salidas ni problemas considerable salvo la normal saturación en los kilómetros finales de cada salida, eso sí, cada salida había disfrutado de más kilómetros descalzo, quería acabar esta incursión comprobando si podía afrontar un entrenamiento de 10 km. entero descalzo.
La ruta elegida era la preferida, hasta San Felipe, 10 km de los cuales los 2 primeros y los 2 últimos eran los más ariscos con los pies. Empezamos como siempre en la playa de Cariño.

Playa de Cariño (Ferrol) otra vez


Los 2 primeros kilómetros, aunque el asfalto es malo, se pasan bien, despacito, los pies están aún frescos. El paso a asfalto nuevo se nota mucho en los pies, ahora parece que corro sobre una alfombra, es asombroso lo relativo que es todo. El ritmo va aumentando poco a poco de forma natural, es muy agradable sentir el suelo. Al llegar San Felipe vuelvo a bajar el ritmo, hay alguna zonas con gravilla que me hace ir con cuidado. Me cruzo una par de señoras que me miran incrédulas. Cetarea, km. 5, media vuelta, cruzo el pueblo y vuelvo a salir a carretera buena, además pendiente favorable, me animo a aumentar un poco el ritmo, llegando a hacer estos 2 km. rondando los 5:30’/k. Iba cómodo aunque consciente de que no aguantaría ir más rápido.

Pies desnudos


Llego a los últimos 2 km., de nuevo asfalto mordedor, noto una barbaridad en los pies la diferencia ya con ocho kilómetros recorridos. Tengo que bajar mucho el ritmo y noto las plantas algo magulladas pero sobre todo las yemas de los dedos pequeños algo sensibles. Ya no voy tan cómodo pero nada grave que me obligue a parar, molestia pero no dolor, esto está hecho. Llego a la playa de Cariño a recompensar a mis pies con el merecido baño en la mar salada.

Conclusiones


Bueno, pues han pasado rápido estos días de vacaciones y sus salidas “descalcistas”. Como decía al principio, el objetivo era disfrutar del correr a la vez que experimentar si era capaz de hacerlo descalzo. Esto no es una transición al descalcismo aunque sí he comprobado que podría hacerla.
Las conclusiones que saco de esta incursión son las siguientes:
  • Muscularmente: no he encontrado ninguna diferencia entre correr descalzo y con sandalias. La técnica creo que es la misma, no tengo ninguna molesta o agujeta especial.
  • Respecto a la zona de apoyo y rozamiento del pie, sí que hay gran diferencia con llevar una suela por muy fina que sea. Es necesario hacer muchos kilómetros, salir muchos días para fortalecer las plantas de los pies y los dedos, acostumbrados a ir protegidos, para recuperar su función natural. Haber corrido estos días descalzo no me hace pensar ni de lejos que ya esté preparado para correr descalzo. Después de los 10 km. si estuve algún día con los dedos un poco sensibles, aunque no he llegado a tener ninguna ampolla.
  • Sobre la superficie de entrenamiento. Bueno, sigo teniendo mis dudas, una cosa es correr por una carretera limpia y solitaria de Galicia y otra es correr por donde corro habitualmente en Madrid mucho más sucio y lleno de “obstáculos”, esto es lo peor a mi juicio. Es posible que algún día me dé por preparar un 10K descalzo, pero ahora mismo, no me seduce la idea de correr en Madrid descalzo. 
  • Respecto al ritmo de carrrera, bueno, una cosa es correr unos días despacito y otra muy distinta es hacer una carrera. Para llegar a ritmos “aceptables”, cercanos a los que pueda tener con sandalias, me faltan muchos kilómetros de entrenamiento descalzo, pero veo claro que se puede mejorar, cada día he podido ir más rápido. 
  • Sensaciones: Esto es lo mejor, correr descalzo es correr con un sentido más. Vas sintiendo la textura, la temperatura, … Añades nuevos registros en tu memoria de cada uno de los sitios por los que corres. Por supuesto, también agudizas mucho la consciencia de tu propio cuerpo, de saber dónde pones tus pies, la propiocepción. Por otra parte el ser capaz de correr sin nada en los pies también aporta otras sensaciones de poder, de libertad, de satisfacción con uno mismo.
  • Imagen, y la gente qué dice. Bueno, normalmente no lo entiende, aunque esto no es nuevo respecto a las sandalias, sólo es un grado más. No entienden qué necesidad hay de correr descalzo o te discuten que obligatoriamente tiene que ser doloroso digas tú lo que digas vamos, que eres masoquista sí o sí, eso a pesar de no haber ellos probado a correr descalzo o incluso algunos ni siquiera a correr, pero esto es un tema que uno ya se cansa de explicar, cada uno que piense/haga/corra como/con lo que quiera y respete a los demás. Vive y deja vivir.
Resumiendo, correr descalzo es cuestión de tiempo y ganas, si las tienes y entrenas, me ha quedado claro que los pies van recuperan poco a poco su funciona natural y no necesitas nada mas.
¿Cuantas cosas has dejado de hacer solo porque te han dicho que no se podía?

Mis pies observan la ría de Ferrol

Ay señor, jubílame pronto!!
Otros enlaces de interés:
  • Minimalismo para dummies, ¿Qué es el running minimalista?
  • Plan de entrenamiento para correr un maratón de forma natural y sin dolor (1ª parte de 3)
  • Ferrol running (Ruta 2): De Cariño a San Felipe
  • Ferrol running (Ruta 3): De Cariño a Doniños
  • Camino Inglés de Santiago Corriendo y Caminando – Día 1 de 2: Puerto de Ferrol – San Esteban de Cos (61 km.)