El verano puede ser una buena época del año para los runners siempre y cuando respetemos unas normas básicas que todos conocemos y obviamos continuamente.
- Evita las horas centrales del día para correr.
- A ser posible corre a primerísima hora de la mañana, las seis es la hora ideal porque ya tenemos luz natural pero el sol todavía no ha salido completamente y, por tanto, el calor es menor.
- Lleva SIEMPRE contigo algún sistema de hidratación, lo ideal es llevar un cinturón o mochila.
- Aunque no tengas sed, bebe cada 10-15 minutos. Bebe poco a poco y no grandes cantidades.
- Utiliza ropa técnica de running, que permita la transpiración, y de colores claros.
- Si corres por un circuito sin grandes sombras utiliza una gorra y gafas de sol.
- Si vas a un gimnasio sustituye un rodaje (una hora aprox) en exterior por una sesión de Spinning o Elíptica.
- Refréscate la cabeza y el cuerpo de forma regular durante el entreno.
- Escucha tu cuerpo, al primer indicio de dolor de cabeza, náuseas, mareos, visión borrosa, etc. para de correr dirígete a un lugar con sombre, hidrátate y descansa. Pide ayuda si lo ves necesario.
- En la medida de lo posible corre en grupo o, por lo menos, acompañado de un runner más.