¿Alguna vez os habéis metido en un sauna pensando que ibais a salir con el cuerpo de Adriana Lima? Pues bien tengo que deciros que esto es sólo un mito entre otros muchos que hay sobre el sudor.
La respuesta a por qué el sudor no adelgaza es bastante simple y es que no perdemos grasas mediante la sudoración sino agua y sales minerales. Puede entonces que ópticamente nos veamos un poco más esbeltos pero la grasa sigue ahí y sólo un ritmo de ejercicio constante puede hacer que la perdamos.
Esto me lleva a la siguiente cuestión y es si podríamos quedarnos sin minerales tan importantes como el hierro o el magnesio puesto que sí eliminamos sales minerales al sudar. La respuesta es que nuestro cuerpo es muy listo y cómo estos minerales son fundamentales para nuestro funcionamiento diario los guarda a cal y canto para que no se escape ni uno.
Otro mito o creencia viene relacionado con el alcohol y la eliminación de éste a través del sudor. Es cierto, que cuando vamos un poco piripis nos ponemos a sudar de repente, pero el alcohol necesita ser primero procesado por el hígado y después eliminado por vía renal. En cualquier caso si existiera un poco de alcohol en nuestro sudor la cantidad sería mínima o prácticamente inexistente.
Y para terminar dos de las creencias más arraigadas. La primera es que si al beber más sudamos también más. Esto vuelve a ser falso porque el encargado de eliminar los líquidos es el riñón y no las glándulas sudoríparas. Y la última y no por ello menos importante es la creencia de que los hombres segregan un sudor más fuerte al de las mujeres. Tengo que deciros que el sudor no entiende de sexo y que en ambos el tipo delsudor es el mismo, lo que sí que hay son pequeñas diferencias relacionadas con por ejemplo que las mujeres tienen un mayor flujo sanguíneo por lo que pueden liberar calor sin necesidad de sudar mucho.