Cosas que he aprendido con el primer hijo

Por Padresenpanales @Padresenpanales

Os voy a hablar de cosas que he aprendido con el primer hijo, y que estoy haciendo diferente con el segundo.

Para empezar el parto… el parto fue diferente ya sabes que habrá dolor, como es el hospital… y las sensaciones tras nacer fueron diferentes, bonitas, pero no te pilla tanto por sorpresa. Ya sabes además que a partir de ese momento dormir pasa a ser secundario, y sabes como hay que comenzar la lactancia. A diferencia del primer hijo, con el segundo estuve con él en el pecho horas seguidas, no lo llegué a echar a la cuna más que para ir a ducharme los días del hospital, el resto, pegadito a mí (o al papi o a la abuela que algún rato me hicieron el turno para descansar).

En casa… más de lo mismo. ¿Para que insistir en que duerma en una cuna? Si como va a dormir es conmigo, tumbado cerca o encima, pues ale, conmigo, colecho, que queremos dormir y descansar. Durante el día hay que atender a otra niña, y él quiere cercanía, descansar, a mami… pues porteado todo el tiempo, y listo. Aunque haya que oír “ay que listo que es, como sabe” y tontadas así.

Los cambios de pañal… son diferentes porque tienen diferente sistema de salida las chicas y los chicos, pero ya sabes a lo que te enfrentas, posibles cacas trepadoras, exceso de pis y cambio de ropa completo a altas horas de la mañana, y por eso estás bien preparada.

La hora del baño… con la beba era entre dos y nos faltaban manos, ahora he sido capaz de bañarlo sola desde el principio, aunque muchas veces lo hacemos los tres juntos para que la beba forme parte de lo que hacemos con el enano. Ya sabemos como cogerlo, como sacarlo de la bañera sin que se escurra, como curarle el ombliguito los primeros días…

Síntomas de… con la beba todo era nuevo, no sabíamos porque lloraba, porque estaba molesta. Con el enano ya te lo imaginas y hay más probabilidad de acertar, gases, sueño, mocos (sí, tan pequeño y con mocos snif), ya sabes usar el sacamocos sin que te de arcadas (que al principio nos parecía un sistema algo asquerosillo), en que momento es mejor hacerlo para que haga las tomas bien… Con los gases igual, ya sabemos cuales son las mejores posturas, los masajes, solo hay que probar a ver cual le gusta más.

Sin duda el segundo hijo lleva ventaja sobre el primero, se encuentra unos papis con algo de experiencia, no tiene todas las atenciones que tuvo el primero porque nos faltan manos, pero sus necesidades afectivas y físicas están cubiertas por “expertos”. Nunca llegaremos a ser expertos como para ponerlo sin comillas, cada niño es un mundo y comienzas de cero, pero está bien contar con la ventaja de haber vivido algo parecido antes, ¿no creéis?

Ser el segundo no está mal del todo, ¿Cómo os fue el comienzo de la bimaternidad?