Cosas que valen hasta para el frío polar
03/13/2019
El invierno llega y se queda un tiempo, cada año, a veces con sus copos de nieve, y con los paisajes blancos, y el frío te insta a quedarte en casa con una taza de té o bien un chocolate. Son razones por las que esta estación resulta mágica. Hay cosas para combatir el frío, y de ellas vamos a hablar, como las Chaquetas calefactables que encontramos en Decathlon. Y también hay cosas que nos sirven para decorar esos artefactos que usamos para calentar nuestras casas, como los radiadores, cosas como los cubreradiadores, y de eso también vamos a hablar.
Las innovaciones tecnológicas nos han traído protecciones más seguras contra el frío. Esas, por ejemplo son las chaquetas calefactables, que no son más que chaquetas fabricadas con telas aislantes al frío. Tienen una serie de placas y mecanismos electrónicos que producen calor. Nos ayudan mucho en los tiempos de bajas temperaturas y frío extremo. Las chaquetas calefactables se nos presentan en diferentes modalidades.
¿Qué hay de un cubreradiador?
El radiador es esencial contra el frío pero no es muy estético. Por ello la solución son los Cubreradiadores. Le dará a la decoración de tu casa la armonía que buscas, en invierno. Puedes poner objetos sobre él, floreros, libros, pero nunca pongas “figuritas” de esas que regalan en las bodas… ¡son horribles! y dan señales a “to kiski” de la poca idea de decoración que tienes si practicas el figurinning…
No Tener Frío
Todos hemos experimentado el resfriado común alguna vez, con su congestión nasal, su tos y secreción nasal. Algunos resfriados son peores que otros, esto es obvio, y algunos progresan a enfermedades más graves. Es importante conocer la diferencia para que podamos tratar el problema de manera más efectiva. El resfriado común no suele ser motivo de preocupación. Sin embargo, cuando un resfriado se vuelve persistente, puede significar que se ha convertido en una infección sinusal.
Muchos de los síntomas de una infección sinusal son los mismos que los del resfriado común. La descarga nasal, la tos y el dolor de garganta pueden ser síntomas de un resfriado o de sinusitis. A veces, lo que parece ser un resfriado no es un resfriado, sino una infección sinusal o alergia. Pero, ¿cómo puedo saber cuándo lo que estoy experimentando es una infección sinusal?
Hay algunas señales reveladoras para buscar. Para empezar, si tenemos sinusitis, normalmente tendremos la nariz tapada. Las fosas nasales se bloquean con mucosidad espesa. Cuando la mucosidad no se mueve por un tiempo, produce bacterias y eso conduce a la infección. La congestión nasal asociada con una infección suele ser más grave que la que tienes con un resfriado.
Mientras que un frío típico tiene algo de congestión, por lo general no es grave por más de un día. Si tienes una descarga nasal espesa de color amarillo o verde, esto indica una infección. Generalmente la secreción nasal es delgada y clara. El moco espeso puede no drenar adecuadamente, lo que puede causar presión y dolor en los senos y la cara. Puedes tener un dolor de cabeza. También puedes desarrollar fiebre.
La fiebre es la forma que tiene el cuerpo de combatir una infección y suele indicar que hay infección. Los escalofríos también pueden acompañar a la fiebre, que suele ser de bajo grado, a menos que la infección se agrave. Una fiebre alta requiere atención inmediata por parte de un médico. Una infección sinusal puede hacer que la cara se vuelva dolorosa al tocarla. Esto se debe a que las cavidades nasales inflamadas se encuentran en la cara.
El primer lugar donde puede notar el dolor es a ambos lados del puente de la nariz, pero el dolor puede estar en cualquier parte de la cara. Este tipo de dolor no acompaña al resfriado común. Un resfriado típico suele durar varios días y luego los síntomas mejoran. Si después de unos días los síntomas no muestran mejoría o empeoran, puedes tener más que un resfriado.
Lleva un registro de tus síntomas para que puedas determinar cómo está progresando tu enfermedad. Si tus síntomas han empeorado o si has desarrollado fiebre, debes consultar a un médico. Él puede ayudarte a determinar si el problema es un resfriado o si es una infección. La infección sinusal generalmente se puede tratar con antibióticos con éxito, especialmente cuando se detectan temprano.