¡¡Feliz domingo, chicas!!
En esta entrada vengo a presentaros una marca de cosmética ecológica, que me ha gustado muchísimo conocer, y seguro que os va a encantar, jejeje (al menos eso espero...). Se conoce con el nombre de "Alter Eco"... Pero antes, de enseñaros los productos y contaros mi opinión, me encantaría hablaros un poquito de su historia, sobre como surgió esta marca...
Esta marca fue creada por dos chicas (Elsa y Gabriela), en 2014. Ambas se conocieron en una Jornada que se organizó en Aranjuez (Madrid) en 2013, donde surgieron varios proyectos. Y, gracias a estas Jornadas, se empezó a crear un grupo de gente que deseaban poner en práctica modos de vida más sostenibles, que incluyeran desde el cultivo ecológico de huerta y plantas medicinales, al aprendizaje de técnicas y saberes artesanales, como el trabajo de esparto, la fabricación de pasta y cerveza artesana, y la cosmética natural. Junto con otra compañera, comenzaron sus pasos de aprendizaje de cosmética natural, donde pronto empezaron, sólo, a utilizar ingredientes de cultivo ecológico en la cosmética.
Al poco tiempo, Gabriela (empresaria) y Elsa (bióloga), necesitaban dar un paso más y profesionalizar su pasión en un proyecto de cosmética que tuviera en cuenta mucho más que unos ingredientes naturales y una fabricación artesanal. Buscaron el respeto total por la naturaleza a través de todos sus procesos, uniéndolo a un funcionamiento colaborativo, cooperativo y que tuviera como fin apoyar otra forma de economía, más local, sostenible y solidaria (de ahí su frase del logo "Cosmética con Principios"). Es así, como nació "Alter Eco", donde añadieron como logo una flor de diente de león (que es símbolo de permacultura: una planta humilde pero con un gran potencial para generar vida y salud).
Sin duda, os animo a que visitáis su tienda online, donde encontraréis gran variedad de productos bioterapéuticos (fitoterapia y aromaterapia) y de cosmética natural, ricos en ingredientes procedentes de la agricultura ecológica, totalmente certificados, y respetuosos con el medio ambiente. Tales como: bálsamos y aceites terapéuticos, jabones afieltrados (con lana sin tratamientos químicos), desodorantes, cremas, sérums, productos de aromaterapia, etc.
El paquete me llegó por mensajería, con una presentación preciosa y muy bien cuidada... Hasta tuvieron el detalle de añadir una ramita de lavanda, con lo que me gusta a mí, jejeje.
Sinceramente, me ha gustado mucho esta preciosa marca. Especialmente, sus envases, su packaging, su diseño, todo tan artesanal, ¡es precioso!, pero es que los productos tienen unos aromas increíbles y envolventes, además, de ser de buenísima calidad.
- Jabón Aloe Vera y Arcilla Blanca:
Seguramente sabréis que me encantan los jabones ecológicos, y si son, artesanales mucho más. Aún tengo varios en casa pendientes de terminar, pero, para mí, nunca son suficientes. Es uno de los productos que más me gusta en la cosmética bio, ya que cunden un montón (más que los productos fluidos y/o crema) y cumple de maravilla sus cualidades.
Este jabón, es muy cremoso, y tiene un aroma muy rico y suave, aunque al principio me resulto un poco extraño el olor que tenía...; imagino que será por la falta de aceites esenciales... Pero luego, ya me adapté a él, fácilmente, y me pareció bastante acogedora su fragancia.
Está enriquecido de aceite de oliva, aceite de coco, agua de manantial, aloe vera, manteca de karité, arcilla blanca (caolín), entre otros ingredientes. Por lo que es ideal para pieles mixtas/grasas.
Es un jabón, que la verdad, me está gustando mucho... Hace una espumita muy agradable, suave y placentera, dejando la piel limpita, calmada, y nada reseca, al contrario, la deja muy hidratada, suave y controla muy bien el sebo de mi piel.
Por eso, yo lo estoy usando en el rostro a diario, sobre todo por las mañanas (por las noches prefiero usar un gel más suave), ya que al contener arcilla blanca, es perfecto para pieles mixtas/grasas, porque me deja la piel muy purificada. Y la verdad, me está yendo muy muy bien. Pero, además, también lo pueden utilizar los demás tipos de pieles, de manera puntual, porque también actúa contra las manchas del rostro y no reseca nada, gracias a sus aceites vegetales ecológicos.
- Jabón de Caléndula:
Uno de sus productos más conocidos, es este jabón, que a diferencia del anterior, es más grande y ancho... No indica los gramos que contiene, pero es cierto que pesa bastante, jejeje.
Es un jabón con un aroma que me encanta, muy sutil pero muy muy agradable. Además, algo que me ha encantado de estos jabones (como habéis podido ver) es que tienen grabados el logo de la marca.
Está enriquecido de aceite de oliva, aceite de coco, agua de manantial, manteca de karité, extracto de caléndula, hidróxido de sódico, entre otros ingredientes.
Es muy suave con la piel, ya que ademas, de realizar una espumita muy agradable, deja el cuerpo muy nutrido, y para pieles sensibles y/o secas (tanto rostro como en el cuerpo), viene muy bien.
La verdad, me ha gustado mucho, y ahora que empieza el buen tiempo, me gusta mucho ducharme con jabones... Con el frío, me solía duchar rápidamente, jejeje, y por eso utilizaba más bien, geles de ducha, pero ya que se acerca la primavera, estoy empezando a utilizar más los jabones sólidos en la ducha. Además, éste, es un producto que tiene propiedades antisépticas, anti-inflamatorias, regenerantes, cicatrizantes y desintoxicantes.
- Bálsamo de Caléndula Regenerante:
Otro de los productos más conocidos de esta marca, es este bálsamo facial y/o corporal. El cual se presenta en un tarro de plástico, muy bonito, que trae 100 ml de cantidad.
Para seros sincera, yo antes no usaba este tipo de productos, me parecían demasiado pesados..., hasta que me animé... Y la verdad, es que me encantan. Cunden un montón y, especialmente, hidrata la piel de maravilla.
Yo, he estado probando este producto, prácticamente en el cuerpo, ya que en el rostro, lo probé una vez, y para mi tipo de piel mixta/grasa, era demasiado hidratante. Por lo que si tenéis la piel del rostro sensible y seca, ¡seguro que os va a encantar!.
Tiene un aroma muy agradable y rico, que me recuerda mucho al jabón que os he enseñado un poquito más arriba en esta entrada, aunque con un olor como más dulcecito y suave... Pero, es cierto, que me gusta mucho como huele.
Cómo os podéis imaginar, este tipo de producto, son de textura densa (como los bálsamos de labios), que al coger producto, más bien, sueles adquirir una película transparente, un tanto aceitosa.
Confieso que me ha gustado mucho este bálsamo. Tras salir de la ducha, con la piel, un poquito humedecida, lo aplicaba por todo el cuerpo, y sinceramente, hidrata muy bien. No es nada pesada, grasienta ni molesta, ya que se absorbe rápidamente, dejando un aroma muy rico y duradero en la piel.
También lo he usado mucho en los pies, sobre todo, en los talones, que ahora ya empezamos a llevar otro tipo de calzado... Y, es cierto, que los hidrata muy muy bien, dejándolos muy suaves.
Es un bálsamo rico en caléndula, manteca de karité, aceite virgen de oliva, manteca de cacao y cera de abeja. Unos ingredientes muy nutrientes para la piel. Además, este producto es perfecto también, para aplicarlo con el cambio del pañal del bebé.
¿Qué os han parecido estos productos?