iba yo por la droguería en busca de mi rímel básico, como servidora, cuando me topé con un expositor cuajado de lo que al principio creí unicornios, pero que resultaron ser ponys.
una vez me volvió en sí la retina tras el fulgor, me di una vuelta por la tienda, ya mirando con otros ojos (literalmente) lo que por allí había, y descubrí un montón de productos más, llenos de motivos que yo asocio con el mundo infantil. pero todos perfectamente integrados como una alternativa adulta más: maquillajes, mascarillas faciales, pestañas postizas
y entonces me pregunté: ¿de verdad todo esto es cosmética para adultos? porque me vais a perdonar, pero me parece que va mucho más encaminado a que las niñas empiecen a pintarse como puertas a edades alarmantemente tempranas, con la excusa de hacerlo a conjunto de sus madres, pero con productos adultos y reales, al fin y al cabo.
es decir, no hablamos de artículos destinados a que la niña se ponga la cara como una puerta con sus amiguitas en una tarde de juegos, no. hablamos de que se acicalen como parte de su rutina real. y, por supuesto, que luego utilicen otro lote más de productos «para el cuidado de su piel».
y pude despejar más tarde las pocas dudas que me quedaban sobre el tema al salir de la tienda, viendo en las correspondientes webs y redes sociales de esas marcas, cómo no se hace referencia a menor alguno para publicitar esas colecciones. solo aparecen mujeres encantadas de rejuvenecerse tras máscaras de Frozen «con polvo de estrellas» y de llenarse los párpados de todos los colores de un arcoíris fosforito (flúor para los modernos). dime de lo que presumes y te diré de lo que careces. presumes de tener un público objetivo adulto con cerebro infantil, y lo que tienes es un público real infantil, con convicción de tener un cerebro adulto.
que lo mismo soy yo que lo miro por donde no es, pero para mi que esto es una forma más de hacer saltarse etapas a nuestros menores, esos que luego demonizamos por crecer antes de tiempo «sin que nadie sepa cómo«, y convertirse en adolescentes con 10 años.
no sé, igual cosas como éstas tienen algo que ver.
De nada
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